María Patiño pidió a Makoke que deje a su exmarido ser feliz y le advertía que, de no ser así, tenía algo que contar. Desde ‘Fiesta’, la aludida respondía que no sabe a qué se refiere, pero le invitaba a contar lo que quisiera: “No tengo nada que esconder, no entiendo nada y menos la empatía que tienes como mujer”, decía. Ahora, María Patiño responde.
“No os tengo miedo, haced lo que querías, tengo la conciencia muy limpia”, decía la colaboradora del programa y María Patiño respondía desde ‘Sálvame’: “Me alegro de que no nos tengas miedo porque en el pasado sí decías que tenías miedo a Kiko”. Además, le reprochaba que se crezca “ante una aparente debilidad que es la que tenemos ahora”.
La presentadora no hablaba de deslealtades sino de algo “más importante”, algo que se está “construyendo” y se niega a participar en su destrucción: “Tú sí lo estás haciendo”.
Además, le exigía que no utilice determinadas armas en su contra: “No me hables de feminismo ni me utilices el género mujer porque yo no me congracio con nadie que me hace daño por interés económico, tú sí”.
María se alegra de que haya superado “el miedo con tu primer marido”, algo de lo que hablaba “en privado” y le recordaba que ella es la misma de siempre: “Yo soy la misma que te defendió a muerte porque Kiko no fue sincero cuando contó los motivos de la separación”. También la misma que no tuvo miedo de contar que Kiko tenía “una doble vida”, la que contó cómo la propia Makoke le descubrió… Y ella le dabas las gracias entonces.
Sin embargo, en determinada circunstancia, Makoke puso a alguien “de testigo” y María empezó “a tirar del hilo”. Fue un día en unos grandes almacenes, cuando Makoke descubrió un mail: “Me voy a quedar aquí porque aún tengo días”. Si no sabe a qué se refiere, María recomendaba a Makoke que hable con su primer marido: “Pregúntale por mí y por lo que sé, por la madera del invierno”.
Además, le daba una pista más. Según María, Makoke intentaba en privado “poner a Kiko Matamoros como un monstruo” mientras lo desmentía en público: “Ponías a alguien de testigo y eso no se hace, no por ser mujer, sino por ser un ser humano. Y sabes de quién estoy hablando”.