El equipo al completo subía a la redacción de la 'Sálvame Fashion Week' para hacer una petición forma: que Aguasantas vista a alguno de los colaboradores para desfilar sobre la pasarela. Pero, de repente, María Patiño cogía un bote de desinfectante y rociaba todo a su alrededor... incluida a Adela González.
En concreto, el líquido pulverizado alcanzaba a la presentadora en un brazo y, lo que es peor, en un ojo. "Eso es ácido, échate agua, que te quedas ciega", advertía Kiko Hernández, poniéndose en lo peor.
Adela se rascaba el ojo, se secaba el brazo... y acudía al servicio médico. La presentadora se ausentaba durante algunos minutos y, a su regreso, aparecía con el ojo tapado diciéndole a María: "Tengo el ojo súper rojo, me ha dicho la doctora que si me sigue picando vaya a urgencias".
Así que Adela advertía a María que podía llamarla a las tres de la mañana para que la acompañara al hospital. Ella asentía, dispuesta, pero David Valldeperas le pedía que se la llevara a casa para cuidarla.
"¡Que es mentira!", gritaba Adela y todos bailaban 'Así es la vida'.