Alejandra Rubio acaba de confirmar que, tras un año y medio de relación, ha roto con su pareja, Carlos Agüera. Sin embargo, no es la primera polémica que protagoniza y es que ha tenido que enfrentarse a la polémica del topo de su familia y a su conflicto con Kiko Hernández. Te damos las claves.
Alejandra Rubio nos contó, visiblemente afectada, que ha roto con su novio, Carlos Agüera. Fue durante su intervención en el programa ‘Fiesta’, donde nos contaba que aunque se quieren “mucho” y ella ha sido “muy feliz con él”, no ha sido suficiente. Ambos se llevan muy bien con sus respectivas familias, en ese sentido se declaraba “contenta” e insistía en que entre ellos no ha pasado nada malo.
Pero ¿Cuál ha sido el motivo de la ruptura? Al parecer, la distancia les ha pasado factura y también el trabajo de la hija de Terelu Campos: “Yo soy de una ciudad, él de otra y yo pertenezco a un mundo que a él no le gusta nada”.
Sin embargo, este no es sino el último de varios frentes mediáticos que ha tenido que encarar la colaboradora. Uno de ellos empezó con una información de Kiko Hernández, que sostenía que Gustavo, hombre de confianza de María Teresa Campos, era en realidad un topo de la familia que las había grabado en conversaciones privadas.
Tanto Carmen Borrego como Terelu Campos se mostraron del lado de Gustavo y Alejandra dio un paso más, acusando a Kiko Hernández de traición: “Yo dije que no se fiaran de quien no se tenían que fiar. Sabía que esto iba a pasar”, decía.
El aludido respondía desde el plató de ‘Sálvame’ y lo hacía con una advertencia. Según Kiko, Gustavo habló de Alejandra, en concreto, sobre cosas de su esfera más íntima: "El otro día me equivoqué, dije que la más perjudicada era Carmen Borrego pero no, mucho más lo eres tú porque desvela detalles tuyos tan íntimos que te podrían doler tanto y que solamente te pertenecen a ti y a tu intimidad, que son hasta delictivos”.
Sin embargo, Alejandra se mostraba de lo mas tranquila y decía a Kiko Hernández: "No están hablando de algo delictivo en sí, no es que yo vaya quemando por ahí contenedores, lo que es delictivo es contarlo, que alguien haya contado algo íntimo mío".