Kiko Hernández ha terminado por romperse. El colaborador de 'Sálvame' confiesa estar "destrozado" por la polémica con Belén Rodríguez tras confesar que fue ella quien habló de los 100.000 euros que le prestó hace tiempo. Pero hay más y es que, según Kiko Matamoros, Belén Ro habría reclamado el dinero por adelantado a Kiko por "miedo" a no recuperarlo: "Sería la hos*** más gorda que me podría llevar en estos 20 años que llevo trabajando en la tele".
Kiko Matamoros asegura que si Belén Rodríguez pidió a Kiko Hernández el dinero que le había prestado antes del plazo estipulado fue no porque tuviera una necesidad, sino que se inventó una “excusa” porque tenía “miedo” a no recuperarlo.
Ya en plató, el aludido respondía que, de confirmarse, sería “la ho*** más gorda que me podría llevar en estos 20 años que llevo trabajando en la tele”. El colaborador evitaba entrar en detalles porque él no es quien ha empezado con la polémica y dejaba caer: “Es ella la que lo tiene que aclarar, lo que no puede hacer es un polígrafo y luego comerme yo un marrón toda la semana”.
En ese momento tomaba la palabra Kiko Matamoros para desvelarnos cómo había encontrado a su amigo fuera de cámaras: “Su dolor es inmenso”. Para Kiko este es el momento “más difícil” desde que está en ‘Sálvame’ y aunque no quiere victimizarse, se siente “maltratado”, “traicionado” “vilipendiado” y “calumniado” por su gran amiga.
Finalmente, el propio Kiko Hernández explicaba que ha pedido ayuda a su compañero porque está “destrozado” con el tema: “Es una pena, después de tanto tiempo, descubrir esto”. Y es que no entiende ni que se haya sometido al PoliDeluxe ni cómo ha manejado la polémica: “Me molesta que para tapar otra cosa se diga que soy mal pagador”.
Pero no es solo esto sino todo lo que le han contado por detrás: “No sé si es cierto, pero si es cierto he sido la persona más gili***s que de verdad…”
Y es que, según Kiko Matamoros, esta historia la ha contado Belén Ro durante años tanto en periodos en que estaban distanciados como que eran uña y carne. También cuando Belén, tras romperse la pierna, pasó una semana en casa de Kiko Hernández: “Es una manipulación de una historia que ella se ha encargado de esparcir durante muchos años. Y si no que me pongan los cables a mí, gratis”.