La felicidad del anuncio de su compromiso le ha durado muy poco. Después de que Tamara Falcó comunicase que Íñigo Onieva y ella se han comprometido y que se casaría en junio de 2023, se filtraban unas imágenes de su novio en un festival besando a otra mujer. El vídeo, que habla por sí solo, provocaba la polémica nada más 24 horas después del anuncio.
Las imágenes se producían en el festival estadounidense 'Burning Man'. Con una semana de fiesta, los asistentes del evento disfrutan de una puesta en escena sin igual en un entorno de lo más llamativo: el desierto de Nevada. Perdidos en él y sin comunicación, en este festival el 'dress code' es galáctico; no existe la moneda sino el trueque; y solo se venden bebidas por lo que hay que ir equipado para perderse en el desierto. Íñigo Onieva parece ser muy fan de este festival, ya que no es la primera vez que asiste. También lo hizo en 2018 y 2019.
Precisamente este ha sido el argumento de Onieva para defenderse de las acusaciones de infidelidad. Tras reaparecer de la mano con Tamara Falcó - para asistir a la boda de unos amigos en la que inicialmente su prometida iba a acudir sola - el empresario se desmarcaba diciendo que las imágenes del vídeo filtrado corresponden a 2019.
Tamara Falcó ha mostrado su contundente apoyo a Íñigo Onieva. Cogiéndole de la mano y mostrándose tranquila, la hija de Isabel Preysler no ocultaba su sonrisa al escuchar a su prometido decir que se casarán "le pese a quien le pese" y al afirmar que nunca le ha sido desleal a Tamara. Asimismo, ella declaraba categórica que nunca perdonaría una infidelidad.