Un testimonio habló en 'Sálvame' de la existencia de unas fotos que provocaron el deterioro del matrimonio de Antonio Montero y Marisa Martín Blázquez. Aparecieron en un sobre anónimo a nombre de la periodista pero ¿Qué pasó? El propio colaborador de 'Sálvame' nos dio los detalles.
Alguien quería hundir a Antonio Montero facilitando información a ‘Sálvame’. Sin embargo, las imágenes supuestamente comprometidas del colaborador del programa no desvelaban ninguna deslealtad a su mujer, Marisa Martín Blázquez.
Lo que sí hizo esta persona es contar algo relativo a la relación de pareja del paparazzi, un episodio que habría provocado el deterioro de su matrimonio. Esta persona asegura que la colaboradora recibió unas comprometidas imágenes en las que se veía a una mujer sentada en las rodillas de Antonio, unas fotos que habrían afectado mucho a la pareja.
El aludido replicaba desde el plató de ‘Sálvame’ que él mismo nos habló de lo sucedido en el programa. Fue en la sección ‘Quiero dinero’, cuando nos contó que, tras una investigación que hizo, las fotos llegaron de forma anónima a su buzón con el objetivo de chantajearle.
El sobre iba dirigido a su mujer, Marisa Martín Blázquez, que le vio en las instantáneas en compañía de otra chica. Se trataba de una mujer a la que conoció en un viaje de trabajo, le produjo una “convulsión emocional” y le hizo plantearse por primera vez en la vida por qué le pasaba eso.
"Yo tuve mi problema en casa y además desembocó en una crisis personal mía, no por la que se pudiera montar en mi casa", relataba Antonio. Sin embargo, la historia no fue a más.
Ambos evitan dar detalles de su vida privada pero lo cierto es que, en alguna ocasión, Montero ha explicado que aunque separados, siguen viviendo juntos por son familia y se respetan: "Conozco a Marisa desde hace 37 años, tenemos dos hijos en común y somos una familia tradicional con los defectos de todas las familias", decía él.
Además, explicaba que llevan una vida "muy normal" con sus "virtudes y defectos" en la que su único objetivo es el bienestar y la unión de la familia: "Yo contraje matrimonio religioso convencido absolutamente después de seis años de noviazgo respetuoso (...) Luego hay mil movidas que te pueden pasar, he hecho viajes muy largos de trabajo y he llegado a un parto medio tarde o me he tenido que ir inmediatamente después con líos y siempre hay cosas que pasan, pero por encima de todo, en mi vida, está el respeto a esa familia (...) Para mí sería un fracaso que no pudiera ser así y, como nos queremos, nos llevamos y nos respetamos, estamos encantados”.
Además, Antonio tiene muy claro que Marisa es la mujer con la que quiere estar: "Si se anunciara mañana el fin del mundo, me abrazaría a ella”. De hecho, no descarta que pueda haber una reconciliación entre ellos. De hecho el paparazzi no se imagina rehaciendo su vida con otra persona.