Kiko Hernández ha llevado una bomba al plató de ‘Sálvame’ y se ha subido al pulpillo, que se ha convertido en histórico, para contar su información que ha dejado a todos con la boca abierta en directo, donde los protagonistas son Ana María Aldón y Ortega Cano.
“Es tan fresco que ocurrió ayer. Lunes 18 de julio, una fecha muy importante para este país, me llaman unos amigos, tengo que ir al aeropuerto a buscarles, llego a las 5 de la tarde de mi casa, tengo que ir a comer y llamo a mi restaurante favorito”, así pone en antecedentes el colaborador sobre cómo se ha enterado de la información:
“Llego con mis hijas mis amigos, entro y está totalmente vacío, menos dos personas que estaban en la barra del bar, que se me quedan mirando. Me siento, empiezo a comer y se me acerca alguien que me dice: ‘esta persona es del circulo cercano a Ortega Cano”, asegura.
El tertuliano sigue con el relato y cuenta lo que le dice esta persona: “Me dice que hay una guerra pero bestial, está claro que están pasando cosas, pero están pasando más de lo que nosotros pensábamos. Sé lo que está pasando dentro de esa casa de Fuente del Fresno, esto va a traer cola. Quién me lo ha contado, es familiar es Ortega Cano. Todo se puede tapar un tiempo, pero no toda la vida”.
Kiko cuenta cómo están las relaciones entre Ana María y la persona que trabaja en la casa: “Me cuenta que se llevaban de fábula. Iban a correr juntas, me dice mi fuente que ellas no se pueden ni ver ahora, que hay una guerra entre las dos, brutal y están a hos** limpia”. Y finalmente, da la noticia bomba y del verano sobre la relación del matrimonio: "Desde hace semanas, la familia sabemos que están separados”.