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‘Sálvame’ comenzaba con imágenes de la acampada del ‘Mediafest’ completamente desolada. Lo que ayer comenzaba como una fiesta a lo grande con una acampada entre amigos ha terminado como el Rosario de la Aurora.
Pero no solo la acampada, el plató del programa comenzaba la tarde bajo mínimos. Terelu Campos, María Patiño, Kiko Hernández y Gema López eran los únicos que se presentaban a trabajar este jueves.
“Yo quería pedir disculpas por lo que pasó ayer en la acampada, la verdad, es que se nos ha ido de las manos… estoy así un poco risueña, estoy muy cansada, tengo una resaca emocional…”, advertía Patiño. “Menos mal que aquí hay una persona centrada que eres tú, Terelu, y otra descentrada que soy yo”, apuntaba la presentadora.
Los colaboradores de ‘Sálvame’ debían aguantar en la acampada toda la noche y al día siguiente presentarse a su puesto de trabajo. Algunos de los convocados decidieron marcharse, cada uno a diferentes horas.
Lydia Lozano fue la primera en desaparecer, cuando todos sus compañeros empezaban a jugar a la botella, se preguntan dónde está. El motivo son sus dolores de espalda, Rafa Mora aseguró “ya está buscando excusas para irse a casa”. Carmen Borrego asegura que “se ha hecho daño”.
La periodista explica que se va a “escapar”, a pesar de saber que el resto de sus compañeros “me van a poner a parir”. Cuando Lydia intentaba hacer una broma se lanzó al suelo y empezaron los dolores, “me consta que van a decir que soy una chunga y que les he dejado tirados”.
Laura Fa queda sorprendida por la hora a la que se marcha, “¿a las tres y media se marcha?” Rafa Mora se siente indignado porque no se ha despedido, “ni siquiera nos ha dicho hasta luego”. Según su punto de vista es un invento más de la colaboradora, “estamos acostumbrados a que finja”. Aunque sus críticas se vuelven contra el colaborador, Rafa Mora decide marcharse también porque “ya empiezan mis vacaciones”.
A la hija menor de Teresa Campos no le gustó que le mojaran con agua fría y activo el protocolo de abandono, aunque al final ha terminado aguantando hasta esta mañana, pero no sin su particular drama. “Es agua congela, hasta luego Lucas”, entonaba Borrego al recibir el agua fría por encima: “¿Es necesario? He venido, el juego es el juego, pero chorreando no me quedo”.
Después del intento de sus compañeros para quedarse, la tertuliana decidía pasar la noche de acampada, algo que ha explicado en directo hoy en ‘Sálvame’ y ha apuntado directamente a Pipi Estrada: “12 horas, machacándote el cerebro una persona, llega un momento que dices: o me voy o aquí va a ocurrir algo”.
Alonso Caparrós fue otro de los que abandonó la acampada y es que sufrió un gran bajón: “Es una cosa que ya no me apetece ponerme en riesgo más, ya no estoy bien. Tengo un agotamiento brutal, he llegado al limite físico y de mente”.
El tertuliano terminó visitando el servicio médico, donde le recomendaban reposo domiciliario, algo que le hacía marcharse: “Me sabe mal”. Él ha querido estar en directo para explicarse: “No pude, eso me dolió un montón, me lo estaba pasando bien. Adoro lo que hago, pero llegó un momento que no podía más, me fui con mucha rabia y muchas ganas de llorar”.