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El cabello seco y dañado es uno de los problemas más comunes a los que se tienen que enfrentar una gran parte de mujeres. ¿Cómo saber si mi pelo está seco? Se puede apreciar a simple vista la falta de brillo, además de tener una textura muy áspera. Esto sucede porque cada filamento piloso está recubierto por una especie de capa protectora de células, que se superponen unas a otras como si fuesen las tejas de un tejado.
Si se tuviera una melena sana, las escamas de la cutícula retienen con mayor facilidad la humedad y protegerían a las capas interiores. Esto haría que dicho pelo tuviese un tacto suave y sedoso. Si, por el contrario, está dañada, los filamentos son porosos y dejan escapar la hidratación, y, en consecuencia, se vuelven mucho más frágiles.
Esto se puede dar por distintos factores, como, por ejemplo, una gran exposición al sol, a la sal, al cloro y al aire acondicionado durante los meses verano, o al viento y la calefacción en los meses de invierno; así como peinarse continuamente con secadores, planchas o tenacillas sin aplicar un protector del calor. Algo que también empeora el estado del cabello es estar continuamente tocándolo, ya que los mechones hacen fricción entre sí, se pueden enredar, agrietar y volverse mucho más sensible.
Otro de los motivos más comunes es el uso de químicos, como tintes, alisados permanentes, decoloraciones… Estos productos y técnicas son muy agresivos con el pelo, ya que dan a lugar a que se abran las puntas y se partan mucho más rápido.
¿Qué debo hacer si mi pelo cumple con esas características? Para recuperar el brillo, la sedosidad y lucir una melena bonito, es importante lavarlo con una temperatura templada, pues recordemos que el calor empeora su estado. Otra acción a tener en cuenta es peinarse el cabello mojado con un peine de dientes anchos, y hacerlo poco a poco desde las puntas hasta el cuero cabelludo. De esta forma, los nudos que están en la parte superior no se tensan a medida que bajas hasta el final del pelo.
Es fundamental aportarle la hidratación que necesita, por ello, deberás utilizar un acondicionador diario de medios a puntas cada vez que laves el pelo con champú, y una vez a la semana aplicar uno intensivo durante media hora. Por ello, hemos buscado las mejores mascarillas que harán que tu pelo se vea mucho mejor.
El tratamiento de 500 ml está diseñado para proteger al cabello de todos los agentes externos. Está formulado con queratina, un componente que ayuda a fortalecer y reparar los filamentos pilosos abiertos. Otro de sus ingredientes es el aceite de argán, que aporta más brillo y suavidad. Entre los beneficios de la manzanilla, destaca su propiedad calmante, que evitará y aliviará el cuero cabelludo irritado.
No contienen sulfatos ni parabenos, unas moléculas que eliminan la suciedad y la grasa del pelo, y que son altamente dañinas para la salud capilar si se aplican en todos los lavados. Estos son los principales responsables de crear la espuma, pero al mismo tiempo pueden provocar irritación, una desaparición del tinte más rápida, picor y escozor en los ojos. Para purificar en profundidad, se utilizan limpiadores de origen vegetal, los cuales son mucho más amigables con la piel y para el medio ambiente.
Además, un punto a destacar es la conciencia con el entorno de la marca, ya que sus productos están envasados en materiales reciclables, lo que no generan un gran impacto ecológico, y no testan en animales, por lo que son libres de crueldad animal.
Si estás cansada del encrespamiento, de la falta de brillo y suavidad de tu pelo, entonces esta mascarilla es para ti. Esta crema te ayudará a fortalecer y regenerar los filamentos pilosos desde el interior, lo que favorecerá un mejor estado, y ayudará a prevenir las clásicas y detestables puntas abiertas.
Está formulada para aportar la hidratación y la nutrición que necesita tu pelo, para lucir un cabello de anuncio. Para lograrlo, solo tendrás que aplicar durante 3 minutos la mascarilla intensiva de UniqOne, 1 o 2 veces a la semana. Tras ello, solo tendrás que aclarar con abundante agua.
La fórmula es vegana, no contienen ningún ingrediente de origen animal y el envase de 300 gramos está fabricado al 100% con material rPET, es decir, plástico pet reciclado. De esta forma, ayuda a reducir la huella medioambiental que supone el uso de los derivados del petróleo. Así, se convierte en un recipiente transparente y muy resistente, además de proporcionar una gran barrera contra el oxígeno y el vapor de agua.
El pelo dañado y débil suele ser muy fino, lo que favorece que se abran las puntas y se partan con mucha más facilidad que con aquellos que son sanos y gruesos. Esta mascarilla está formulada con aceite de coco, aceite de tiaré y extracto de vainilla. Estos ingredientes ayudan a hidratar, nutrir, revitalizar, y aportar brillo y suavidad al cabello. Asimismo, evita que se quiebre, lo repara, evita el frizz o encrespamiento, y fortalece el cuero cabelludo para evitar una caída masiva por debilitamiento.
El aceite de coco es especialmente destacable ya que sus moléculas son muy ligeras y con afinidad proteica. La proteína es un nutriente que mejora la salud de tu pelo y su uso está indicado mayormente para los dañados. Esto favorece un mejor manejo del cabello y la penetración el producto en el interior del filamento para regenerarlo. Además, a pesar de incluir este ingrediente, no deja una sensación pesada, ni apelmaza, ni deja una apariencia grasienta.
Se presenta en un envase de 168 gramos, que no contiene ni sulfatos ni parabenos. Unos componentes agresivos que perjudican la salud de tu fibra capilar. Por ello, se convierte en uno de los mejores aliados para cuidar y mimar tu melena.
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