Recelos hacia los elegidos por la audiencia

Quién iría a decir que sería Jorge quien más recelo despertaría en una parte de la casa al saberse que forma parte del casting por decisión de la audiencia votante. Fue el último en saberlo y por sorpresa, en una noche donde no salió bien parado el grupo que acaba de ceder el poder a regañadientes. A Jorge le intentan colgar un sambenito por haber hecho algún comentario negativo hacia Mayte. Además, fue de los últimos en entrar en la casa grande y muchos pensaban que sería el próximo expulsado. Anoche recibieron la buena noticia para Jorge con decepción. En el caso de Adrián también con rabia y celos.

Ver a Maica contenta por saber que Jorge está fuera de peligro, abrazada a él al mismo tiempo que Violeta, socavó la moral de Adrián. El boxeador piensa que a Maica le gusta Jorge y este puede lograr lo que a él le ha negado. Eso después de estar a pico y pala, incluyendo su flor semanal de los lunes en la cama de ella. “Me he dado cuenta de que solo mira por su concurso”, decía Adrián mientras hacia un trajecito a Maica. Los chicos de la casa acusan de cierta inseguridad. La misma que descubrimos en Edi, receloso con Violeta por todo lo hablado en la casa sobre su relación con Jorge. Una vez descubierto que la audiencia parece estar del lado de Óscar y tras intentarlo con Violeta, parece que Jorge había sido señalado como próxima víctima. Ahora sí que está condenado.

Laura parece padecer algún tipo de amnesia temporal

Ruvens, Óscar, Lucía, Javier, Violeta y Jorge son ya parte de los 17 elegidos por la audiencia para formar parte del casting definitivo de esta edición. Una edición que el jueves cumplirá sus primeras 4 semanas, 28 días donde las relaciones se han ido estableciendo poco a poco, como en las ollas de cocción lenta donde todo sabe más rico. Solamente Ruvens forma parte del que grupo que ha intentado manejar la casa a su antojo y han terminado chocando con la oposición de algunos de los excluidos. Pero, sobre todo, se han encontrado con que la audiencia no validaba sus actuaciones.

Llama la atención escuchar a Laura hablar de su satisfacción por contar con el apoyo del público. Un apoyo, añade, “que otros y otras desearían”. Imposible que no se acuerde de que la semana pasada fue expulsada por casi la mitad de los votos entre 3 nominados. O intenta lavar el cerebro a la gente o sufre de una de esas amnesias temporales que resultarían tan preocupantes en cualquier otro contexto. En realidad, creo que les está costando asumir el evidente rechazo de la audiencia.

Anoche, sin ir más lejos, no entendieron bien que la votación se cerraba definitivamente con una cuenta atrás que ellos mismos jalearon. Es decir, en las próximas 48 horas solo habrá duda y expectación (en unos más que en otros) sobre quién acompañará a Elsa como no integrantes del casting elegido por la audiencia. También debí sufrir los comentarios de algunos despistados que intentaban extender la especie de que la expulsión se había aplazado hasta el jueves para beneficiar al concursante menos votado e intentar su salvación. ¡Pero si ya no se puede votar más! Digo que algunos no tienen tantas dudas porque dan por supuesto que será Mayte la expulsada.

Puestos a conjeturar, creo que los elegidos anoche son los más votados, excepto Ruvens, que sería el siguiente menos votado después de Mayte. Así lo indican algunas encuestas y con la decisión de incluirle en esta primera tanda de confirmados se habría evitado cierta sensación de derrota absoluta en el grupo que vendría Ruvens a liderar. Se salva Ruvens y luego Óscar, con lo cual se pone el foco en la cambiante relación entre los dos. Juan habla poco, pero cuando lo hace suele dar en el clavo. Y no ha tenido reparo en decirle a Ruvens que ahora se acerca a Óscar porque está cagado, del verbo defecar.

El cambio de actitud de Ruvens hacia Óscar es puro artificio

Al ser Ruvens el primer elegido ahora cree estar en la élite de los más deseados por la audiencia, lo cual hará que la siga… que siga metiendo la pata, por no volver a utilizar el verbo defecar. Estar al lado de Javier, Maica, Jorge, Violeta y Óscar no debe hacer muy feliz a Ruvens. Tampoco al grupo de afines que en ocasiones ha manejado como marionetas. No olvidemos que Óscar ha sido su bestia negra, a pesar de haber cambiado su actitud con él desde el domingo. Violeta también ha sido víctima de los comentarios más duros y cáusticos de Ruvens. Jorge era su próximo objetivo, como dije antes. Y Javier es visto de otro modo desde que el lunes se enfrentase a Laura por su intento de convertir poco menos que en vitalicia su labor de cocinera. Solo se salva Maica, a la que siguen llamando “tonta” o “cortita”, como hizo ayer Laura en su cara. Y a mí que me parece la más lista de la casa…

El cambio de actitud de Ruvens hacia Óscar es puro artificio. Sigue siendo igual de desagradable ver a Ruvens levantarse de su sitio en la mesa para ir junto a Vanessa cuando Óscar se ofrece a sentarse con él para que no coma solo. Significativa me pareció la mirada de Juan en ese momento mientras farfullaba: “Hay tantas tonterías, macho”. Este es un indicio más de que Juan no pertenece al grupo de Ruvens. Nunca estuvo tan claro como ahora. A Óscar se le sigue tratando como a un apestado, como cuando Mayte saca su copa del frigorífico y tira al fregadero el agua fresca que contenía. ¿Qué necesidad hay de tener un comportamiento tan enojoso como infantil?

Es tal la confusión de los que duermen en el dormitorio azul que preguntada Mayte por la razón de no haber felicitado a Óscar cuando este volvió salvado contestaba aquella concursante: “Él tampoco me ha felicitado a mí”. Suerte que Jorge Javier le hizo saber que no había razón alguna para felicitarla a ella porque no se había salvado y sigue en peligro de ser la próxima rechazada por la audiencia para formar parte de este fantástico casting. Están tan desconcertados que no saben si hay que felicitar o dar el pésame. Espero que Mayte lo tenga más claro mañana, si finalmente es quien sale de la casa.

Siendo sincero, pienso que al menos Mayte disimula poco durante las galas, comportándose de forma parecida a su día a día. No es el caso de Laura, quien en las galas parece repartir amor y unicornios de colores, pero de normal se prodiga en miradas asesinas, gestos de desprecio y una altivez que nada parece justificar. Lo señalaba ayer Violeta, con gran acierto. “Cómo cambia cuando está el directo. No es nada agradable ni cariñosa con sus compañeros, pero en directo parece puro corazón y alegría. ¿Es la misma persona que veo yo aquí por la tarde? Parece otra”, decía Violeta. Mis dieces.

El eterno conflicto con la compra

Mayte se sigue comportando a veces como si siguiera siendo la “nini” o, como le gusta decir a ella, la “minisúper”. No termina de salir del papel. Y Laura ya no está en la cocina, a pesar de sus intentos por empadronarse allí, pero siguen lloviéndole las críticas por la compra semanal. Es un conflicto eterno que en este caso nace por el mismo hecho de que haga la compra una persona y luego se encargue de la cocina otra. Tal vez deberían pactar esta tarea previamente, independientemente de quien sea “nini”. No obstante, objetivamente, no parece que Laura haya hecho una buena compra.

Muchos nachos, patatas fritas y cosas de picoteo, pero poca comida sana. Esto es lo que reclaman varios concursantes: más yogur (pero no con azúcar y tropezones), muesli y plátano. Manjares no son, pero seguramente habría más consenso en gastar el dinero en ese tipo de productos. También han seguido las quejas porque unos han tenido capricho personal y otros no. Está claro que en esto deben estar todos de acuerdo y ser tratados por igual si quien hace la compra no quiere echarse a la gente encima. Laura no solo ha tenido que desalojar la cocina, apuesto a que tampoco va a hacer la próxima compra.

Moleskine del gato

Ocho millones de votos deciden quién saldrá de la casa mañana. Esto significa que han votado casi medio millón de personas (dado que cada una de ellas emitía 17 votos). De manera que si cada gala nocturna tiene unos dos millones de espectadores únicos, podríamos concluir que vota casi una cuarta parte de la audiencia. Esto es muy poco usual. Movilizar la participación del espectador cuesta muchísimo, por eso me parecen cifras extraordinarias.

Elsa hizo anoche toda la autocrítica que echamos en falta el domingo. Ha visto vídeos y no le han gustado algunas de sus reacciones. Además, se emocionó escuchando a Óscar hablando de ella la misma noche del domingo y posteriormente en el ‘confe’. No me extraña porque Óscar tiene la extraña habilidad de provocar con frecuencia una fuerte emoción en mí mientras le escucho hablar. Estuvo de diez Elsa anoche. Enhorabuena, vasca.

En el vídeo de hoy expreso mi extrañeza por lo poco que se ha comentado en la casa, especialmente por las mellizas, la delación de Elsa ante el error de Silvia. Y repito un chocante comentario de Óscar a Maica.