Antes de finalizar ‘La isla de las tentaciones 8’, Montoya mantenía una conversación muy profunda con Gabriella sobre lo que ha aprendido y, a la vez, sufrido en esta experiencia.
“Lo mejor es tener la respuesta final y es que lo que me da esa persona no es lo que quiero en mi vida, y quizás tú me hayas enseñado a decir que lo que tú me das, por muy cursi que sea y muy repetitivo que suene, es lo que sí pudiera querer”, aseguraba.
Montoya estaba tan profundo que no dudó en cantarle una canción a Gabriella. “Y sabes lo bonito que saco, también, y lo que aprendo, es que cuando se quiere hay que dejar ser a la persona como es… dejar ser es la clave de todo”
Gabriella, por su parte, le da consejos a Montoya sobre cómo enfrentar la hoguera final con Anita, asegurándole que, sin importar lo que decida, siempre le apoyará:
“Yo pienso que no te tienes que arrepentir de nada, todo es un aprendizaje, en realidad yo considero que eso no era amor, pero bueno, quizás por tu parte sí o por parte de ella no… Y que, si decides acabar, o empezar, o lo que sea, o irte solo, que lo digas con mucha educación, con mucho respeto, porque creo que aquí has demostrado tus valores, que sabes hacerlo, que puedes hacerlo, porque la mejor hostia es la que no se da”.
Tras las palabras de Gabriella, Montoya se declaraba: “La suerte que he tenido, y la mala suerte para ella, es que has estado tú. Puedo volver a confiar en el amor por ti, ahora mismo estoy viendo un tesoro delante, y los tesoros hay que cuidarlos”.