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Sergio Aguilera es el cuarto finalista de 'GH DÚO'. Así lo ha dicho Carlos Sobera durante la gran final, ante la máxima expectación de los cuatro concursantes y finalistas, que se encontraban con los nervios a flor de piel. Una final en la que ni el Súper se ha podido aguantar la emoción. Y no es para menos, la ocasión lo merece. Una final que nos está dejando momentazos de todo tipo y cargada de tensión por lo que supone.
"Que nos quiten lo bailao", era lo primero que decía Sergio después de que Carlos Sobera le tranquilizase asegurando que ser cuarto finalista significaba "un titulazo": "Es muy difícil llegar hasta aquí y tú lo has conseguido". "Al final, me lo esperaba. Esta gente viene de 'GH 19', arrastran mucho. Y Marieta es muy fuerte Yo, quizás, era la persona más anónima y que menos fuerza tenía. Me lo esperaba... y muy contento. Yo he llegado Carlos. Para mí esto es un regalo y un sueño. Muchas gracias España", eran las palabras de agradecimiento de Sergio Aguilera.
Marieta se echaba las manos a la cara y se rompía por completo, consciente de lo importante que había sido para ella el concursante granadino y lo mucho que significa para la novia de Suso. Sergio, al ver así a su gran amiga, pedía en pleno directo y a todo el mundo apoyo a Marieta: "Es una persona real, auténtica, sincera, amiga de los suyos... ¡votadla, por favor!".
Más adelante, Carlos Sobera le mandaba ánimos a Marieta: "¡Hay que reponerse!", exclamaba el presentador. Pero la joven no podía evitar esa reacción desconsolada tras la marcha de su gran amigo y compañero de concurso: "Me da mucha pena que ahora ya no esté aquí, lo hemos vivido juntos. Es una persona maravillosa y me hubiese encantado que todo hubiera quedado entre él y yo. Pero bueno".
"Lo quiero muchísimo, es maravilloso. Gracias 'Gran Hermano Dúo' por hacer que me reencuentre con él", señalaba una Marieta emocionada como nunca. Y es que si para algo ha servido 'GH DÚO' es para que Marieta y Sergio Aguilera se conozcan y, no solo hagan las paces (al comienzo del concurso llegaron reinando la tensión entre ellos), sino que forjen una amistad, quizás, eterna.
Por último, Sergio pasaba a la casa de Guadalix de la Sierra, donde ha convivido durante las últimas semanas. "No sé si lo vas a echar mucho de menos", le decía el Súper. Sergio mantuvo diversos enfrentamientos en la recta final que provocaban su desgaste: "Ya tenía ganas de irme... al final, los días pesan". "'Gran Hermano' lo llevaré en el corazón, Súper. Entré sin expectativas y me habéis robado un cachito de mi corazón. Desde aquí os doy las gracias por cuidarme y por hacer posible el sueño de muchas personas", subrayaba un Sergio que, si hay algo que no se ha quitado desde que comenzó su aventura, es su gran sonrisa de oreja a oreja.
Avanzada la gala de la gran final, Sergio llegaba a plató, donde se reencontraba con su madre y su novia. Tras repasar su paso por el programa, la tensión aparecía y el cuarto clasificado de la edición protagonizaba un tenso cara a cara con Miguel Frigenti.
"No me he entendido con él. No me creo el perdón que me pidió, porque el otro día en otra pelea me volvió a sacar la 'z'. Ahí tengo que volver a contar hasta 30 o 40. No me gusta esta persona, he intentado poner de mi parte, pero no me gusta. No creo que sea sincero. Cuando tú estás en una pelea y atacas a una persona donde más daño le puedes hacer...", comenzaba.
"Yo te doy la enhorabuena", respondía Frigenti. "Yo creo que dentro de esa casa todos nos equivocamos. Yo no me río del acento de nadie, tú también te has equivocado y has dicho cosas que hacen daño a los demás. Cuando me dices que soy mala persona, que vivo de la mierda, te contesto con la 'z'. No obstante, por respeto a tu madre, es tu momento. En unos días, si quieres hablamos. Felicidades y disruta de la noche".
Pero, lejos de acercar posturas, Sergio dejaba bien claro sus intenciones respecto al colaborador: "No quiero hablar contigo, muchas gracias, pero no quiero. No porque al final lo hemos visto todos, se enconde detrás de bromas. Ya no lo compro. No quiero a esta gente", zanjaba.
