Montoya ha protagonizado una de las hogueras más duras en la historia de 'La isla de las tentaciones'. El acercamiento de su novia, Anita, con Manuel González le causó tal desesperación que el participante quiso abandonar la hoguera y tuvo que ser retenido y calmado en varias ocasiones por sus compañeros. 

"Hay imágenes para ti", le anunció Sandra Barneda a Montoya. El participante se mostró expectante y nervioso, hasta el punto de darle la mano a Joel mientras veía las primeras imágenes. En ellas, Montoya comprobó el tonteo que había tenido Anita y Manuel en Villa Playa. 

"No tengo ganas de nada. No me sale. No la reconozco. No me apetece ni berrear ni llorar ni nada. Para mí, me decepciona tanto que haga eso realmente... No me la creo. Y él en su línea y en su salsa: metiéndose en la piscina con todas", expresó Montoya en primer lugar. El novio de Anita explicaba entonces que le había molestado mucho que ella le llegase a preguntar al soltero si le gustaba. "He visto de nuevo esa 'miradita' que era lo que me daba coraje", dijo. 

Montoya también vio cómo Manuel se había referido a él y cómo le había nombrado. Escuchó del soltero llamarle "papa frita" y vio a Anita no responder ante ello. "¿Por qué crees que Manuel te llama 'papa frita'?", le preguntó Sandra Barneda a Montoya. "Un 'papa frita' es lo que tiene él en la cabeza, que es un huevo frito. Un 'papa frita' es lo que ha sido él toda la vida. ¿Qué valores tiene Manuel, el que "ha hecho historia"? ¿Dónde está? ¿Qué ha hecho Manuel? Eso es un 'papa frita", respondió Montoya indignado. 

Aún había más imágenes para Montoya y éstas iban a dolerle profundamente. Anita se había sentido lo suficientemente cómoda con Manuel como para invitarle a dormir en su habitación. Montoya lo descubrió en la hoguera. 

Cuando el sevillano vio cómo Anita cogió de la mano a Manuel y le metió en la habitación, se rompió por completo. Montoya se levantó desesperado y se fue hacia el mar repitiendo "No puedo, Sandra, no puedo. Me quiero ir. No quiero estar ahí". Momentos más tarde, regresó y afirmó sentirse "decepcionado" con su novia. "Es como si fuera otra persona", le dijo a sus compañeros. Fueron ellos quienes le aconsejaron que no se levantase y que visionase todas las imágenes de Anita, aunque doliese, para darse cuenta de "quién es realmente". Con ello, Montoya también visionaba lo que había sido la noche de Manuel y Anita y su desesperación se desbordó. 

Sin poder creérselo, Montoya se rasgó la camisa y gritó "¡Que me voy!". El sevillano acabó en el suelo totalmente desconsolado y repitiendo que no quería estar más en 'La isla de las tentaciones'. De hecho, llegó a despedirse de Sandra Barneda: "Un beso, Sandra, cariño. Gracias por venir", le dijo en pleno brote. La presentadora le pidió que se calmase. 

Montoya estaba incrédulo y lleno de rabia. "Esa tía no te quiere nada", "Esa chica no te merece"... le decían mientras sus compañeros. "Siento decepción. Este no es el amor de mi vida", concluía Montoya aparentemente más recompuesto. Pero luego, se derrumbó pensando en que las imágenes también las verían sus familias y que Anita había sido la primera chica que su madre había aceptado "por primera vez".

Cuando Sandra Barneda le comunicó que ya no había más imágenes para él y que con ello acababa la hoguera de los chicos, Montoya se levantó rápido y se fue andando solo por el camino de antorchas completamente destrozado.