Silencio en la casa
Todos durmiendo desde hace un rato menos Ruvens que deambula por la casa. En este punto me despido ¡Buenas madrugadas!
La gran final es cosa de cuatro: Juan, Óscar, Ruvens o Violeta. Uno de ellos ganará GH. Por su parte, Nerea y Edi se quedan a las puertas tras su expulsión. La primera se encontraba un percal familiar poco alentador a su salida en el que hasta su abuela arremetía contra Luis. Por otro lado, Edi se despedía de Violeta de forma dramática y ella ha confesado el miedo a perderle como pareja cuando acabe el concurso. Con este panorama, conectamos con la casa.
Todos durmiendo desde hace un rato menos Ruvens que deambula por la casa. En este punto me despido ¡Buenas madrugadas!
Tras su discusión con Ruvens, Óscar se queda en el vestidor hablando solo: "Siempre yo, luego yo y después yo...¡menudo ego tiene!....Edi le dice lo mismo, pero con él no se enfada", lamenta. Después, se desahoga con Violeta: "Él me ha dicho que no le gusto y me lo creo....Y como no hay química, me resulta fácil...Pero es que él es muy raro...Últimamente le noto de peor humor que antes....pero si quiere espacio, pues fenomenal...Él se enfada más conmigo que yo con él....Yo en el directo solo he dicho que soy muy fantaseoso y pregunté a toda la casa si veía lo mismo que yo....Todo el día me da órdenes y me manda...Que gane, haga su película y sea feliz". Después, hablan de Frigenti. Óscar comenta que le vio en una discoteca de Madrid "y se estaba poniendo buenorro". Le hubiera gustado "que hubieran metido a un tío así" para él.
Óscar se encuentra a Ruvens en la cocina y defiende que no es dependiente: "Vivo solo", argumenta. "Estás detrás de mí todo el tiempo", le acusa Ruvens. "Tú también", retoma el vasco. Entonces el manchego le pide su espacio: "Para mí es importante no discutir contigo...Necesito un poco de tiempo para no saturarme...Es por mí, no por ti". Además, le confiesa a Óscar que no le gusta que le dé "la vuelta a todo" y que no sepa pedir disculpas. "Hay cosas que no quiero que menciones y lo haces...Me estás chuleando y te piras para eludir responsabilidades", añade el cineasta. "No me vas a hablar así...No quiero discutir contigo, si me hablas así en ese tono", reacciona el profe de equitación. "Tú no vas a establecer el tono en el que te puedo hablar....A mi no me gusta escuchar muchas mierdas de tu boca", sentencia Ruvens. Entonces Óscar pone los pies en polvorosa.
Cuando Óscar no está, Ruvens se desahoga: "Tengo muchos nervios porque creo que voy a acabar discutiendo con él esta semana...Que se controle....Me va agobiar", le cuenta a Violeta y Juan. Además, opina que "Óscar ensucia mucho y es mejor que cocine otro".
Ruvens le pide ayuda a Óscar y Violeta "para no estar pegado a Óscar todo el día" porque sin no va "terminar discutiendo". El cineasta necesita un respiro: "Estás muy intenso...Eres muy dependiente"; le suelta al vasco. Por otro lado, el manchego acusa al vasco de cocinar demasiado lento y prefiere que lo hagan otros. "La cocina tiene sus tiempos...No me vas a decir lo que tengo que hacer...Si he cocinado para doce, claro que puedo cocinar ahora".
El personal cena en un ambiente con paz y armonía. "Parecemos compañeros de piso", resalta Violeta. Por su parte, Óscar comenta que está encantado con hacer campaña: "Me hace mucha ilusión".
Después de una intensa gala, toca reponer fuerzas. Juan y Óscar se ponen manos a la obra para cocinar.
Violeta informa de que Edi ha tenido un gesto muy simbólico con ella: "Me ha dejado un palillo en la cama", revela.
Violeta y Ruvens cuelgan un cartel de Edi en la puerta del baño. "Voy a llorar cada vez que cague viendo su cara", suelta la rubia en tono de broma.
Ruvens comenta que ahora el porcentaje de Violeta va a subir un buen cacho: "Te llevas los votos de Nerea y Edi", vaticina. Por su parte, Violeta sigue con la mente puesta en el gallego: "¿Dónde ira mi chico esta noche? Supongo que se lo llevan al hotel".
A continuación vemos un vídeo en el que Violeta le confiesa a Edi que está enamorada de él y es la primera vez en su vida que le ocurre algo así. El gallego reacciona incrédulo ante la declaración y ella se mosquea. Después JJ le pregunta a Edi si se consideran pareja. "Prácticamente sí...Nos imaginamos cosas fuera". Ella se muestra más rotunda: "Sí, por supuesto". Después llega el momento de la verdad. JJ lee el veredicto de la audiencia: debe abandonar la casa. Violeta llora desconsoladamente a pesar de su triunfo. "Vales oro", le suelta él.
JJ da la palabra a la abuela de Nerea y lamenta el comportamiento de Luis: "No nos ha saludado (al abuelo y a ella) y eso me ha dolido", recrimina. "Ellos tampoco me han saludado", se defiende Luis. Nerea rompe a llorar.
JJ conecta con la casa e informa que la audiencia ha decidido que continúe en la casa Óscar. Violeta rompe a llorar. La siguiente expulsión está entre Edi y ella. La rubia le confiesa a Jorge Javier que tiene miedo de perder a Edi cuando salga de la casa.
Nerea ya está en plató y recibe el cariño de los suyos. Nerea le pregunta a Luis qué tal va la relación y el responde que "mejor que nunca". Después, a la muchacha le ponen imágenes de la guerra de suegras. "Era uno de los miedos que tenía yo...Además, he visto que Luis se reía en las imágenes de mi madre", suelta la muchacha. "Es solo un fragmento de un vídeo", defiende Luis. "Ha habido actitudes de Luis que no me han gustado...Encima has traído a la gala a seis amigos tuyos que se reían de Nerea cuando veían sus vídeos", interviene la madre de Nerea. "Es mentira como una casa...Como sigas mintiendo, me piro", reacciona Luis. "A mí no me vas a dejar de mentirosa", retoma la suegra de Luis. Por si fuera poco, interviene la madre de Laura para tirar una lanza a favor de Luis. "Estoy flipando con lo que estoy viendo", reconoce Nerea. Pero a pesar de todo, la morena asegura que quiere continuar con su relación. Después ponen la famosa canción de Whitney Houston y la pareja se da el filete.
La audiencia decide que Ruvens y Juan continúen en la casa de Gran Hermano y, por lo tanto, se salvan de la segunda expulsión.
Los cinco finalistas vuelven a la sala de expulsión, uno de ellos se convertirá en el segundo expulsado de la noche. Mientras esperan la decisión de la audiencia repasan los vídeos de sus castings que han visto antes porque piensan que pueden influir en los votos.
Ruvens: "Está claro que ese vídeo ayuda a la gente a ver la evolución de la gente, y se ha visto perfectamente". Óscar: "Yo no he dicho anda que no sea, he sido totalmente sincero, no voy a ir de buenismo y luego demostrar otra cosa". Ruvens: "Yo he visto evolución en todos". Mientras tanto, Violeta y Edi se dan cariño por si uno de los dos resulta ser el segundo expulsado de la noche.
Jorge Javier actualiza los porcentajes actuales y en la casa se quedan sin palabras. "Se ve que hay una subida aunque claro, suben los demás también", dice Juan y Óscar añade: "Quién es el favorito de la casa, quién es".
La audiencia decide que Nerea sea la primera expulsada de la noche en un duelo contra Violeta. "Te voy a echar mucho de menos, te quiero muchísimo", dice Violeta entre lágrimas y Nerea la abraza antes de irse: "Eres mi ganadora, te voy a apoyar muchísimo fuera, se fuerte, eres mi hermanita a partir de ahora ya lo sabes, te quiero".
La audiencia decide que debe continuar en la casa Juan, Óscar y Ruvens. La expulsión se queda entre Nerea y Violeta, una de los será la primera expulsada de la noche.