Ha llegado la 'gala de los juicios', la cual estamos retransmitiendo al detalle minuto a minuto. Un momento clave en el concurso en donde los concursantes son juzgados por diversas causas. La primera en entrar a su juicio contra el pueblo ha sido Violeta. Cabe destacar que, a pesar de que es el juez quien esclarece los hechos del paso de Violeta por el concurso, es la audiencia la que dicta sentencia. La joven se veía las caras con su señoría, don Pedro Chamorro, quien finalmente le decía a la acusada cuál era la decisión definitiva de la audiencia.
La causa que se le abría a Violeta es por "ser soberbia y engreída", y lo primero que hacía la joven era prometer ante el juramento "decir la verdad, toda la verdad y nada más que la verdad". A Violeta se le acusaba también de "ser una persona muy buena, tener demasiada personalidad, de basar el concurso en besarse con Edi y dejarse influir por él en todas las decisiones", señalaba el juez. Violeta se declaraba inocente y a continuación entraba a la sala el primer testigo que cree que Violeta es culpable de los cargos que se le imputan: Miguel Frigenti.
El colaborador de Telecinco mostraba rotundidad en sus palabras: "El concurso de la acusada se ha basado continuamente en repetir lo guapa que es y tener una carpeta. No va más allá. Ha sido una concursante completamente superficial y tiene un concepto de sí misma que se cree más de lo que realmente es. Tu concurso no ha sido tan espléndido". Además, apuntaba que era de todo menos sincera.
Posteriormente entraba a la sala una segunda testigo, Laura Jiménez, madre de la concursante de 'Gran Hermano'. La que ha sido la defensora de Violeta durante los tres meses que llevamos de concurso creía que no había sido ni soberbia ni engreída en la casa de Guadalix de la Sierra y pronunciaba una defensa a ultranza de su hija, sin ningún pero. Además, el juez le preguntaba lo siguiente: "¿Le gusta a usted el novio de su hija?". "Por supuesto", respondía la madre de Violeta.
Por último entraba Laura, actuando también como testigo y dándole algún zasca a Violeta: "No ha sido consciente de sus errores. Lo de ser creída se lo tiene que mirar un poquito". En ese momento, Miguel Frigenti entraba en escena: "Uno se puede querer siempre que no menosprecie al contrario. Violeta se ha creído mejor que todo el mundo. Se ha creído la más sincera cuando ha sido la más falsa del concurso".
Violeta subrayaba y matizaba lo siguiente: "En los vídeos puedo parecer un poco creída. Todos son bromas que hago con Edi. No soy nada creída, me molesta mucho que se me llame eso. Jamás me veo por encima de otras mujeres. Al contrario, soy una persona que con todas las mujeres de la casa siempre está diciendo piropos constantemente a los demás, que siempre ensalza a las personas y que ayuda a los demás a que se quieran más y a que aumenten su autoestima. Jamás me pongo por encima de otras personas".
Finalmente, el juez le comunicaba a Violeta que la audiencia había determinado que es culpable con un 63%. "Estoy segura de que si esas personas me conocen y conviven conmigo durante un día cambiarían su percepción sobre mí. Soy una persona muy payasa y bromista. Son bromas con Edi", confesaba Violeta. "Siempre estoy ensalzando a los demás y diciendo piropos constantemente. Claro que me quiero mucho a mí misma, pero no soy creída", señalaba Violeta.