Todo está listo para El debate de esta noche en la casa. Nerea, meticulosa, le da los últimos retoques al peinado de Violeta mientras los demás concursantes ultiman detalles de sus outfits frente al espejo. La tensión es palpable, ya que todos se preparan para una noche de sorpresas y posibles revelaciones.

¿Cómo resultarán los posicionamientos finalmente? La incógnita sigue en el aire, ya que cada uno de los concursantes ha estado dando pistas sobre sus estrategias y alianzas, pero aún no se sabe quién se quedará con quién en este juego de intereses.

¿Tendremos alguna sorpresa a lo largo de la noche? Los nervios están a flor de piel. Todo puede pasar en un debate tan decisivo, y nadie quiere ser el próximo en enfrentar la eliminación. La expectación es máxima.

Yo ya me despido por aquí para seguir minutando todo lo que suceda ésta noche en El Debate... ¡NO OS LO PERDÁIS!

Violeta busca inspiración para su nuevo look. Mientras duda entre un recogido elegante o lucir su melena suelta y lisa para el debate, revisa opciones en el espejo del baño. La decisión parece complicada, pero Violeta no pierde su entusiasmo por innovar. 

En el salón, la charla toma un tono reflexivo. Ruvens, Edi y Luis comparten su intención de evitar conflictos y mantenerse fieles a sus principios. "Aquí, en cierta medida, hay más frecuencia de discusión que en la vida. Yo nunca me pongo así fuera de aquí", reflexiona Edi. Luis, añade con una sonrisa: "Aquí la gresca es necesaria." 

Ruvens, multitarea en su máxima expresión, participa en la conversación, mientras demuestra sus habilidades de caza con un trapo: "Estoy dejando un cementerio de moscas".

Pequeña tensión en la plancha entre Ruvens y Óscar. Mientras ambos intentaban arreglarse para el debate, Ruvens soltó un comentario que no le sentó nada bien: "Aparta, que entorpeces mi campo de visión."  

Con la gala en el horizonte, el resto de los chicos se suman a los preparativos. Entre peines, maquinillas de afeitar y ropa cuidadosamente seleccionada, todos buscan estar impecables para la noche.

En el baño, continua la sesión de "chapa y pintura" a la que se han unido Nerea y Violeta.

Mientras tanto, en la habitación, Daniela y Óscar deciden abordar el tema de los posicionamientos. La conversación empieza con sinceridad por parte de Óscar, quien revela sus dilemas durante la decisión:

"Hubo un momento en el que pensé en posicionarme detrás de ti," confiesa. "Pero mis relaciones más duraderas suelen ser de amor-odio, como la que tengo contigo. Quería posicionarme detrás de ti para apoyar a Edi, pero al final decidí que quien quiero que se vaya es Juan."

Daniela, sorprendida, le pregunta:

"¿Pero a ti qué te ha hecho Juan?"

Óscar no duda en exponer sus razones:

"A mí Juan nunca me ha caído bien. Me parece un tío muy distinto al que entró el primer día. Al principio no hablaba, solo observaba, y ahora parece que quiere controlarlo todo. No me gusta ese cambio."

En la habitación, Ruvens y Laura también hablan de viajes. Laura habla de su experiencia viviendo en México. "Es una sitio muy peligroso, pero para vacaciones sí que lo recomiendo, tengo muchos amigos allí, no tendríamos ni que pagar hotel. Nos iremos con el manue´"

"Uff... a mí es que con el picante me duele el culo y pedir sin picante es raro, ¿no?", le comenta Ruvens.

"¡Que no hijo!, eres español, lo entienden".

En el salón, Edi, Adri y Juan comparten anécdotas vacacionales. La conversación deriva en las diferencias entre ser jefe y empleado. "Yo nunca desconecto del todo," comenta Juan. "Me voy de vacaciones y tengo que llevar el móvil de empresa. Incluso en casa, la cabeza no para. Pero bueno, también tiene sus ventajas."

Mientras tanto, en el baño, Maica está enfrascada en su rutina de maquillaje para el debate. Concentrada, intenta conseguir el look perfecto, pero algo no le convence.

"Ay, Maica... la que estás liando," murmura en voz alta, como si se reprendiera a sí misma.

Maica y Daniela comparten un momento de complicidad mientras hacen su rutina de skincare, aprovechando para comentar la situación con Óscar.

"Quiere que hablemos, pero a mí ya no me apetece hablar con él," le confiesa Daniela, dejando claro que ha perdido el interés en profundizar en la conversación con su compañero. 

En la habitación, Violeta y Ruvens abordan un tema más personal. Violeta comparte su historia sobre cómo fue concebida: 

"Ya lo expliqué en la curva de la vida, a mi madre la inseminaron con un donante. Me encantaría ver una foto de él o conocerlo algún día, tengo muchísima curiosidad, porque seguro me parezco mucho a él." 

Ruvens, le responde con una sonrisa: "Hija, pues qué buen gusto tuvo tu madre al elegir." 

Adrián y Luis se unen al grupo del salón para seguir divagando sobre el futuro del programa. Luis intenta hacer teorías a largo plazo, Juan, sorprendido, le dice: "¡Pero si solo quedan 3 semanas de concurso!"

Luis insiste en que el cree que ésta semana no saldrán dos personas, pero que a partir de la siguiente empezarán todos los cambios que azotarán la paz que reina en la casa.

La charla deriva en especulaciones sobre la recta final. La mayoría coincide en que el programa terminará un jueves, dejando el domingo para un gran debate con todos los concursantes en plató.

"Yo en cuanto salga me voy a meter un fiestón entre pecho y espalda", les cuenta Luis. Juan dice que, por su parte, él preferirá tomarse el día para él, Adrián, café en mano, y Edi prefieren tomarse solo una "copichuela".

El Súper irrumpe con fuerza en la tarde, intentando despertar a los concursantes al ritmo de tambores. Algunos, como Ruvens, Adrián y Juan, se animan y comienzan a bailar al compás, rompiendo el ambiente de letargo. Sin embargo, la energía de Adrián se apaga rápidamente, y entre bostezos pregunta medio dormido: "¿Hay caféeeeee?"

El pequeño grupo de los despiertos se traslada al salón, donde Edi se une a ellos. Allí charlan animadamente sobre el frío fuera de la casa, mientras intentan sacudirse el sopor de la tarde. Daniela, ajena a ellos, continúa concentrada en limpiar la cocina.

Por su parte, Juan, algo inquieto, le comenta a Edi sus dudas sobre el debate de esta noche: "¿Tú crees que habrá alguna medida nueva? Quizá salgan dos personas, estamos en la recta final, ¿no?". La incertidumbre por lo que pueda suceder parece contagiarse entre los concursantes más conscientes de que el final del concurso está cada vez más cerca. 

Ruvens y Óscar se unen al descanso tumbándoselo en el sofá, pero no renuncian a su charleta, compartiendo las notas que sacaron en selectividad. "Tienes una mente brillante", le dice Óscar.

Mientras tanto, Juan se despereza tras la siesta y deambula medio dormido por los pasillos, con el cabello revuelto y bostezando como si quisiera recuperar el hilo del día.

Otros, como Laura, continuan durmiendo como angelitos...

¡Buenas tardes! 

Tomo el relevo en esta apacible tarde de domingo para mantenerlos al tanto de todo lo que ocurre en la casa de Guadalix. 

La mayoría de los concursantes están entregados al descanso, aprovechando la hora de la siesta para recuperar fuerzas de cara al esperado debate de esta noche. Sin embargo, los recientes posicionamientos siguen resonando entre ellos, generando más desconfianza que nunca. Cada mirada parece esconder una estrategia, y la tensión se siente incluso en el silencio. 

Por su parte, Daniela decide mantenerse activa y se pone manos a la obra limpiando la cocina, demostrando que no todos optan por relajarse en este momento de calma. 

Óscar y Ruvens, que están lavándose los dientes, aprovechan para hacer imitaciones de Daniela y cantar villancicos navideños.

La casa descansa casi al completo. Solo quedan en el salón-cocina, Oscar, Ruvens y Daniela. El resto reposa en las habitaciones, cogiendo fuerzas para El Debate.

Oscar y Ruvens bromean con la noche de villancicos, (algo de montar un pesebre con lejía), mientras Daniela come en silencio. Oscar ha mirado a Daniela y le ha pedido si luego pueden hablar cinco minutos. Daniela se ha tomado su tiempo, y al final le ha contestado con un escueto "vale". "¿Para que quieres hablar con la bruja aburrida?", le ha preguntado Ruvens. Oscar se lo explica, que prefiere nominar a Juan antes que a Daniela.

Oscar le cuenta a Ruvens, que anda medio dormido tras sus gafas de sol, como va a decorar el salón para su noche de coros navideños. Va a necesitar mucho papel de plata, lavanderas arrodilladas, pastorcilla..etc.

Yo, por mi parte, ya me despido y le paso el relevo a mis compañeros. Que tengáis una feliz tarde de domingo.

Daniela y Oscar han coincidido en la barra de la cocina. Ambos comen en silencio, sin cruzar palabra.

En el dormitorio azul Luis y Nerea se echan la siesta junto a Adrián y Juan.

Maica y Daniela siguen tumbadas en la habitación rosa, Maica se queja de que Oscar vaya hablando mal de ella por toda la casa. Llegan Violeta y Nerea y Maica les dice que está muy dolida con Laura por su falsedad.

En la cocina, Ruvens desayuna al lado de Edi. Hablan de como le irá a Edi en el plató si sale el jueves. Edi comenta que le da igual lo que piensen los demás de el, solo le preocupa lo que piense la gente que le importa. Ruvens le dice que cuando salga se puede encontrar con colaboradores que le caían mal y que le defiendan, y viceversa.

Maica y Daniela hablan de la estrategia de los azules contra Daniela. Maica dice que no le perdona a Laura que haya vuelto a la casa de buenas y que luego las traicione participando en la estrategia contra Daniela. Maica piensa en posicionarse detrás de Laura esta noche. Daniela ahora dice que va a salvar a Adrián de las nominaciones. Tengo un lío ya...

En la habitación azul Adrián y Juan se meten en sus respectivas camas. Ambos coinciden en que les da igual se Daniela les salva o no, que ella debe hacer lo que sienta.

Ruvens se ducha en el jacuzzi y Oscar le acompaña. Los dos se quejan de que hay pasta para comer otra vez, Oscar quería haber comido el pollo empanado o con patatas, no desmigado en la pasta. Tras este comentario, Oscar empieza a imitar a las "fresis", pero lo deja para justificar que se va a posicionar detrás de Juan en lugar de Daniela, porque prefiere discutir con Daniela, además ahora que se ha puesto "ese pelo de villana", le gusta mas. Y lo peor de todo, es que no aguanta a Juan porque parece Leticia Sabater cuando se pone a animar a la gente.

Antes de salir del jacuzzi, Oscar deja en un mensaje en el espejo para las "fresis": "Ruscar-Landistas-y un corazón".

Hora de comer. Tenemos a casi todos sentados a la mesa. Bueno, faltan Maica y Daniela, que se harán su comida, Juan, que está en el confe, Ruvens, que se está duchando, y Oscar que da vueltas mientras espera para entrar al confe.

En el baño, Oscar se seca el pelo mientras Ruvens se afeita la barba. Oscar se queja de que Juan sea amigo de Ruvens, con lo mal que le cae. Ruvens se defiende diciendo que a el Juan nunca se la "ha clavado", "no como tus amigas", afirma.

Ha aparecido una araña con un tonelaje importante en la habitación rosa. Jorge ha reconocido que tiene aracnofobia y que no podía enfrentarse a ella. Al final ha ido Adrián a hacerse cargo, y una vez solucionado, ha perseguido a Nerea cadáver en mano. Violeta se ha quedado traumatizada por el tamaño del animal y dice que ya no se siente a salvo en la casa.

Maica ha afirmado tener "arañafobia" y Adrián "serpientefobia". "Pelo no tenía, pero tenía buen cuerpo" afirma Adrián , refiriéndose a la araña defenestrada.

Daniela, Adrián y Maica han realizado el reto de la clase de inglés. A Daniela le está costando grabar el cierre para los seguidores, he perdido la cuenta de los intentos que llevan.