Unas extremas condiciones climatológicas marcan el juego de localización en 'Supervivientes'

Los concursantes de 'Supervivientes' se han enfrentado a otro juego de localización como cada semana. 'La Torre de Hércules', así se ha llamado este auténtico reto al que han plantado cara los concursantes con las mismas ganas e ilusión que siempre. Unos concursantes que además han tenido que jugar con algo en contra: el mal tiempo que había y las duras condiciones climatológicas a las que se exponían.

Un superviviente de cada grupo se debía subir a una torre alta, además de ser el encargado de coger las pelotas que se iba encontrando por su camino. Finalmente, también tendría que encestarlas en unas cestas que se encontraban en el otro extremo de ese mismo camino. Mientras tanto, el resto del grupo iba montando mediante unas láminas el camino para que la torre pudiese seguir su curso con normalidad.

El que menos tiempo tardase era el que decidiría en qué playa viviría, algo fundamental puesto que las diferencias entre Playa Condena y Playa Limbo son notorias. En Playa Condena, Claudia Martínez ha sido la elegida para subir a la torre y en Playa Olimpo, Marieta la escogida para estar arriba del todo desde la torre también. "Estamos a expensas del tiempo", señalaba Jorge Javier Vázquez, puesto que el temporal ponía las cosas muy difíciles para los supervivientes.

Así ha ido el juego de localización

El juego de localización ha dado el pistoletazo de salida y la lluvia no cesaba. "¡Preparados, en tres, dos uno... ya!", anunciaba Laura Madrueño. Trabajo en equipo y sobre todo, comunicación, han sido algunas de las características fundamentales de este juego de localización tan duro para los supervivientes. Finalmente, Playa Condena iba a encestar tres pelotas, tras llegar antes al final del camino y por lo tanto, partir ya con ventaja para hacerse con este juego de localización tan ansiado por los concursantes de 'SV'.

"¡Enhorabuena!", les señalaba Laura Madrueño a Playa Olimpo. "Queremos ir a Olimpo", decía Rubén Torres en nombre del grupo sin pensar nada ni dar lugar a dudas, puesto que se les estaba haciendo a todo el grupo muy cuesta arriba su estancia en Playa Condena. Además, le ha preguntado a Laura si se les pasará el fuego que tenían y su caja de pertenencias que tanto les costó conseguir. Laura Madrueño les ha dicho que "así es", y estos han procedido a dar saltos de alegría ante lo que acababan de conseguir: nada más y nada menos que un cambio de localización.