Cuando parecía que la tensión se había desvanecido entre los Mozos de Arousa, la complicidad entre los hermanos ha terminado enfadando a Bruno, quién ha visto como no hacían caso de su intuición como casi siempre ganadora.
Mientras disputaban la última cadena, los Mozos de Arousa se han quedado sin comodines muy rápido y han tenido que jugársela. Bruno estaba convencido de que la palabra que se escondía entre las palabras ‘Camisa’ y ‘Grande’, era España, pero Raúl le ha dicho que él apostaba más por espalda y ha querido hacerle caso.
Como Bruno imaginaba, han fallado. En la siguiente palabra, Bruno ha tenido claro que la palabra que mejor encajaba con ‘Grande’ y ‘León’ era valiente, pero los hermanos no le han hecho caso y han gastado otro comodín para terminar diciendo “valle”. “Cómo sea valiente…”, ha murmurado Bruno sabiendo que en León no existía ningún valle.
Al comprobar que se habían vuelto a equivocar, los hermanos gallegos se han echado las manos a la cabeza y Bruno ha expresado su enfado “yo mañana vengo con otras personas”. Ion Aramendi no ha querido hacer sangre, pero ha sentido que no le estaban haciendo ni caso al pobre Bruno e incluso, Raúl ha soltado un “espalda lo dijo él, me hizo caso, pero lo dijo él”.
En el momento de la última palabra, Bruno ha tenido clarísimo que la palabra escondida era fortuna, Borjamina no lo ha visto claro, pero Raúl, consciente de sus dos fallos anteriores, le ha dicho que estaba en lo correcto y que le parecía estupendo que se la jugara sin comprar el eslabón perdido.