Adela Montes de Oca ha contado su historia como hija de José María Ruiz-Mateos. Es la hija número 14 del empresario, reconocida legalmente tras una contundente prueba de ADN, aunque nunca tuvo el reconocimiento publico por parte del empresario. Cuenta la joven que nunca pudo despedirse de su padre pues cuando supo que estaba muy enfermo y acudió a su casa para cuidarle, no le recibieron. Tampoco pudo ir a su funeral y ahora, por primera vez, visita el lugar donde fue enterrado.
Siete años después de la muerte de Ruiz-Mateos, Adela cumple su deseo de visitar el lugar en el que descansa su padre. Nerviosa, la joven acude al lugar donde está a tumba de su padre con un ramo de flores y recordando los buenos momentos junto a su padre: "Yo sé que él me quería mucho, yo le quiero mucho y eso es lo único que me importa". "Me siento en paz con mí misma y estoy muy feliz"., añade.