Begoña Gutiérrez, primera expulsada de esta edición de 'Pesadilla en El Paraíso' ha llegado al plató de 'El debate' para hablar del tiempo que ha pasado dentro de la granja, su relación con sus compañeros y sobre su vida, que no ha sido nada fácil.
Begoña, ante el árbol de la vida del programa, se abría ante sus compañeros, antes de ser la primera expulsada y elegía la palabra "soledad" para hacer balance de su vida y contaba uno de los episodios más duros que le han hecho sentirse así: "La muerte del padre de mi hijo fue inesperada y trágica, a mí eso me ha marcado mucho. Mi hijo tenía tres años, me sigue torturando, es como mi talón de Aquiles, en ese momento no era tan común una desaparición voluntaria".
Al verlo, Sandra Barneda ha querido hablar abiertamente sobre el suicidio: "Está muy bien que hablemos, hay cosas que en este país son tabú, en España se suicida muchísima gente, no se dice nada al respecto y es una de las grandes lacras de nuestro país. Hay que empezar a hablar del dolor que provoca a los familiares y sobre todo a ellos mismo que no han encontrado otra salida. Que se hable del tema y te doy las gracias".
“La salud mental o las emociones del alma hace años no eran comprendidas, gracias a Dios ahora la sociedad ha ido avanzando", ha reaccionado Begoña ya en plató y ha contado que por ello no le gusta nada el conflicto: "No me gusta hacer leña del árbol caído".
Tras esto, su hija, a la que ha pedido perdón por hablar de esto en público, le ha querido decir unas bonitas palabras en directo: "Soy la mayor de tres hermanos y estamos orgullosos de la madre que tenemos, es una valiente, una luchadora. Gracias, de verdad, para nosotros eres la mejor". Lo que ha hecho que la ya exconcursante se haya emocionado mucho.