Después de convertirse en el primer expulsado de ‘Pesadilla en El Paraíso’, Pipi Estrada llegaba a plató para hacer frente a todas sus polémicas. Pero no solo eso. El periodista iba a reencontrarse con Alejandra Rubio después de años sin verse en persona.
Carlos Sobera le daba la oportunidad de dedicarle unas palabras a la hija de Terelu Campos: “Lo único que le puedo decir es que me quedo con los buenos momentos que me ha dado la vida. Hemos pasado por distintas circunstancias en nuestra vida, pero ha habido momentos muy buenos e incluso hemos compartido vacaciones. Yo me quiero quedar con lo bueno porque lo malo ya vendrá”.
Pipi trataba así de generar un ambiente relajado entre los dos, pero lejos de conseguirlo se ha llevado un corte que no esperaba: “Pero si es que lo malo lo haces tú, hijo”, le contestaba Alejandra.
Su despedida fue, probablemente, una de las más frías que se han podido ver en la historia de los realities. Ninguno de sus compañeros tuvo gestos de cariño con él cuando se dispuso a abandonar la granja. El periodista asegura que "jamás había sentido el vacío de un grupo".