Hace 14 años Naiala Melo se convirtió en la ganadora de ‘Gran Hermano 8’ tras vivir un intenso romance con Dani López. Ahora, con 36 años, la exconcursante de 'GH' vive una vida frenética viajando por el mundo de la mano de su novio y su perrita Noa.
Con 22 años Naiala saltó a la fama en el reality más conocido de la televisión, y se definía como una joven extrovertida que soñaba con ser modelo. En Guadalix vivió un romance de lo más pasional junto a Dani López, llegando incluso a reinventar el edredoning con una improvisada tienda de campaña.
Tras hacerse con el maletín, la ganadora puso fin a su historia de amor magnificada con Dani y decidió invertir el dinero en un restaurante argentino en Valencia que, a pesar de su éxito, tuvo que cerrar con el paso del tiempo. Mentiríamos si dijéramos que de aquella joven brasileña poco queda: lo cierto es que los años no han pasado por ella, sigue con su personalidad arrolladora e incluso ha decidido volver a sus orígenes.
El Covid-19 ha trastocado la vida de muchas personas, entre ellas la de Naiala. Ante el confinamiento que se impuso en España, la ganadora de ‘Gran Hermano 8’ decidió hacer las maletas y elegir el lugar del mundo donde mejor pasaría la cuarentena junto a su chico. Así, ambos viajaron hasta Brasil, concretamente hasta el lugar donde ella se crió, y en una casa grande con jardín justo al lado de la playa es donde se han refugiado del coronavirus. Cuarentena en modo ‘Supervivientes’ lo define ella misma.
Sin embargo, su confinamiento no ha sido tan idílico como pueda parecer, y es que a los pocos días de estar allí la isla en la que residían quedó completamente confinada y ambos tuvieron miedo ante la posibilidad de enfermar sin tener hospitales cerca. Además, según aseguraba la propia Naiala, desde su llegada los dos tuvieron que enfrentarse una situación complicada en el vecindario: “Somos la preocupación del pueblo, al venir desde España nos tratan como ‘apestados”, confesaba.
En efecto, la ganadora de ‘GH 8’ no viajó sola hasta su destino de cuarentena. Hasta ese paradisíaco destino le acompañó su actual novio, un joven italiano que se gana la vida recorriendo las mejores salas de Ibiza como Dj profesional bajo el nombre de Michele Mustacchio. Su música techno triunfa en la isla balear y su novia es una de sus mayores fans.
Juntos conviven entre Valencia, Ibiza, Italia y ahora Brasil desde hace dos años y forman una preciosa familia moderna junto a Noa, la perrita de Naiala.
No todo han sido alegrías en los últimos años de la exconcursante. En su vídeo de presentación la brasileña nos presentaba a Nano, su perrito de raza carlino por el que sentía adoración. Doce años después, tras una vida plena, la ganadora tuvo que decir adiós al animal que fue como un hijo para ella. “Para mí él no era una simple mascota, era mi mejor amigo, mi alma gemela, mi protector, mi bebé, mi gordito... ¡Mi todo!” escribía dos años después de su pérdida, confesando que haría cualquier cosa por volver a abrazarle.
Quien ayudó a que la joven pasara este duro trance fue precisamente Noa, la “hermanita” de Nano, otra perrita de misma raza que recientemente celebraba sus trece años de vida.
Aunque actualmente vive alejada de las cámaras, la brasileña sigue recordando con gran ilusión su paso por Guadalix. El pasado año dedicaba un hueco en sus redes sociales para recordar con cariño su salto a la fama, con una entrañable foto del día en que pudo coger entre sus manos el maletín desde plató junto a Mercedes Milá. “El tiempo pasa” escribía junto a la publicación:
Como adelantábamos, con muchas más experiencias de vida a sus espaldas, Naiala sigue guardando la misma esencia que se llevó cuando se alzó con el maletín, la de una chica todoterreno que disfruta cada segundo de su vida exprimiendo cada instante, reinventándose constantemente sin dejar de sonreírle a la vida.