Verdeliss es madre de familia numerosa y el nacimiento de su octava hija no ha hecho más que confirmar que para la exconcursante de 'Gran Hermano VIP' su mundo gira en torno a los suyos por los que siente auténtica pasión. Sin embargo, al tener hijos en edades diferentes, la influencer está teniendo que hacer frente a la adolescencia de Aimar de la que ha hablado abiertamente en sus redes.

Madre de ocho hijos y la última de ellos, la pequeña Deva de apenas dos meses, son algunos de los retos que tiene Estefi por delante, pero no son los únicos. La exconcursante de 'GH VIP' ha reconocido que su primogénito ya de 16 años tiene también otras inquietudes y que su carácter empieza a asomar para su disgusto. Por lo visto llega una nueva etapa para ambos y la influencer ha admitido que a partir de ahora vendrán nuevas lecciones que aprender tanto para ella como para Aritz en su papel de padres.

Para Verdeliss, Aimar fue el gran cambio de su vida. El mayor de sus hijos vino de manera inesperada y rompió todos los esquemas que tenía la exconcursante de 'GH VIP' junto a su marido. Por él se inició una historia de amor que dura hasta ahora y cuyo mejor ejemplo es la gran familia que han formado. Su mayor que, cursa Bachillerato, ha sido el espejo en el que el resto de hermanos se ha mirado y para la influencer ese es uno de sus grandes motivos de orgullo.

Animada por todo lo que le queda ahora por delante y, que de nuevo inicia Aimar, Verdeliss ha querido contar cómo está viviendo esta experiencia de ser madre ya de un adolescente y, lejos de lo que uno se puede imaginar, ella lo considera como un tiempo de oportunidades para ver cómo el que era su pequeño va construyéndose. De esta manera, la influencer ha querido derribar el mito de que la adolescencia siempre es un periodo complicado en el que los hijos se distancian de los padres. En su caso no está siendo así:

"No todas las adolescencias son 'malas'", ha empezado diciendo la exconcursante de 'GH VIP', que ha visto en los 16 años de Aimar una oportunidad para seguir aprendiendo. Y, aunque la influencer ha admitido que el joven "como todo chaval, tiene sus cosillas", en su caso, no presenta la característica rebeldía y, de hecho, muestra cada vez unos valores más sólidos y que a ella le sirve de gran ayuda en su día a día. "Amo esta etapa, me flipa ver cómo se construye un ser humano que admiro", ha explicado Verdeliss en sus redes.

Y, por lo que cuenta, no es para menos. Aimar presenta cada vez más unas cualidades que tienen a sus padres muy orgullosos: "tiene una sensibilidad especial, es generoso con su tiempo y su entrega. El primero en prestar ayuda, si el prójimo la necesita", ha contado abiertamente, así como que ya ha hecho sus pinitos de voluntariado.

Lejos de lo que se espera en estas edades, Verdeliss asume que su primogénito se hace mayor y que ahora le esperan nuevos momentos que sumar junto a él. Sin embargo, el amor que siente por él y orgullo son dos cosas que para ella no han cambiado en absoluto durante este tiempo. Tanto es así que la influencer ha puesto un ejemplo reciente.

Toda la familia ha acudido a su última competición de atletismo y allí mientras le animaban, la exconcursante de 'GH VIP' es cuando se ha dado cuenta de todo: "Mientras corría me sentía como aquella madre emocionada en los festivales de cole de Navidad", ha sido la conclusión que ha sacado la influencer. El tiempo vuela, pero para ella y para Aritz sus hijos siempre serán sus pequeños, todos vendrán sin manual de instrucciones y de ellos tendrán que ir aprendiendo, aunque Aimar se lo esté poniendo muy fácil.