La serie documental ‘Rocío, contar la verdad para seguir’ está calando de lleno en la sociedad española gracias a su protagonista y a la dramática historia que en ella se narra. Su valiente testimonio ha servido para que alrededor de Rocío Carrasco se haya creado todo un movimiento feminista en apoyo a la hija de Rocío Jurado.
Además de sus argumentos y las pruebas que desmontaban al "ser", también su pelo, el color de su vestido o sus icónicas frases se han convertido en un elemento de conversación en la calle y en redes semana tras semana. Incluso algunos artistas han visto en ella la fuente de inspiración perfecta para representar el empoderamiento femenino y la importancia de visibilizar la salud mental.
Fue en una de sus apariciones en directo, durante el documental, donde se pudo ver un retrato suyo en su casa. La imagen estaba inspirada en una de las posturas que adopta la hija de Rocío Jurado durante la docu-serie que la ha devuelto a la actualidad. Esa ilustración tiene un autor con nombre y apellidos y desde Outdoor hemos contactado con él.
Con Alejandro Quintano, un salmantino de 29 años afincado en Cáceres, hemos hablado por teléfono sobre en qué se inspiró para el dibujo, cómo le llegó a la hija de Pedro Carrasco y qué sintió al ver el retrato pop de su firma en la mismísima casa de la hija de la cantante. Desde su "pequeño estudio", que comparte con su compañero Sergio Sánchez, ha atendido a nuestra petición...
Nos sentamos un día a ver la tele y vemos que Rocío Carrasco tiene una ilustración con su ya mítico traje rosa en el mueble de su casa. ¿Quién será el artífice de la obra?, nos preguntamos. ¿Quién es? Te preguntamos…
El artífice es Alejandro Quintana. Así es como me llamo yo, aunque en redes, y en el mundo de la ilustración, desde hace unos años, soy más conocido como “ellocodelpelorizo”.
¿Por qué decidiste hacer una ilustración de Rocío Carrasco?
En la línea de ilustraciones que llevo haciendo hace años intento representar la actualidad y los personajes de los que se habla en ese momento. Pero también me fijo en personajes que remuevan conciencias, sean distintos, transgredan y sean distintos. Por ejemplo, con Rocío Carrasco tuve mis dudas porque sabía que muchas personas se me podrían en contra, como ha sido el caso. He recibido muchas críticas tras la ilustración, pero merece la pena.
¿Qué te inspira la imagen que has escogido de ella para tu “dibujo”?
Creo que tiene una simbología muy poderosa. Por ejemplo, el color fucsia, que ella ha elegido para el traje, se ha convertido en un elemento común para todas esas mujeres que lo han pasado mal o quieren apoyarla. Pero también su cara de ternura me ha inspirado para hacer el dibujo.
¿Es esa la característica que has querido reflejar de ella en tu ilustración?
Sí, un gesto de ternura y, a la vez, una sensación de “me he quedado en paz conmigo misma”. Lo que quiero captar en el dibujo es una acción que acaba de terminar o empezar. En su caso, elegí el momento en el que Rocío se quedaba en paz tras contar todo su testimonio y lo que había sufrido.
¿Qué opinión tienes del personaje?
Anteriormente al documental no tenía una idea muy lejana de lo que ha relatado. Obviamente no tenía ni idea ni sabía todo lo que ha contado, pero yo también padecí una enfermedad mental y sí veía comportamientos similares a cosas que he vivido yo o mi entorno.
Por eso mismo, tras el documental, me pareció buena idea representar y dar visibilidad lo que exponía con ella como protagonista. Gracias a la docu-serie se ha hecho público el gran problema que sufren las mujeres a través de la violencia de género, pero también ha puesto sobre la mesa el debate sobre la normalización de la salud mental.
Cuando Rocío salió en una conexión especial se vio tu ilustración en el mueble de su casa. ¿Cómo te sentiste?
No lo pude ver en directo porque era muy tarde y lo suelo ver al día siguiente de manera online. Esa noche sí me avisaron que estaba saliendo mi ilustración en el mueble de Rocío Carrasco a través de redes. Me quedé impactado porque no me imaginé que la gente iba a identificar algo mío porque soy poco conocido. Me sentí muy sorprendido y gratificado por su gesto. También tuve miedo porque en el mismo instante en el que apareció tuve mensajes buenos y muchos mensajes malos. Yo no estaba acostumbrado a tener haters, pero ahora los tengo. Me escriben diciéndome que “no vale para nada” lo que hago o que para qué ilustro a una dictadora. Pero bueno…
¿Le enviaste tú mismo la ilustración?
Pues yo no le envié a ella la ilustración directamente. No pretendo que mi trabajo llegue a los personajes aunque a algunos sí les he pedido permiso para ilustrarles. Que Rocío tenga la ilustración es porque un chico me encargó una ilustración de Ana Isabel Peces personalizada. Era un encargo normal. Como yo ya tenía hecha la de Rocío Carrasco la compró también. Al parecer, él se la dio a Ana Isabel (la suya y la de Rocío), Ana Isabel se la daría a Rocío y ella decidió ponerla en su mueble. Cuando la enseñó en directo fue una sorpresa para mí, no me lo esperaba.
¿Se ha puesto en contacto Rocío contigo?
No, pero es todo un detalle que enseñe mi trabajo sin pedirle nada en un programa en directo de máxima audiencia. Es para estarle muy agradecido. No sólo por promocionar mi trabajo sino por visibilizar ese mensaje y lo que ha comunicado ella. Eso es lo que iba buscando con la ilustración y que antes te he explicado. Eso sí, se han portado genial tanto ella como los del equipo al enseñar mi obra de manera gratuita y sin pedirles nada.
Un trabajo basado en las mujeres porque si nos paseamos por el ‘feed’ de tu Instagram, la mayoría de tus ilustraciones son figuras femeninas. ¿Gira tu obra artística en torno a la mujer?
Sí, y últimamente más. Porque creo que hay que representar no solo a la mujer, sino también su libertad y falta de derechos. También me gusta ilustrar personajes LGTBI, colectivo al que pertenezco, por eso mismo. Creo que es el objetivo de mi marca, ser responsable con el momento en el que vivo…
Es obvio que apoyas al movimiento feminista…
Exacto. Mi intención no es provocar en exceso porque no es mi estilo, pero sí visibilizar. Todo lo que hago es porque lo veo necesario de dibujar en ese momento, no es porque crea que vaya a ser comercial y vaya a vender más o menos. Hago lo que necesito y me apetece en el momento. En este caso, apoyar al feminismo. Las críticas ni me van ni me viene, creo que es lo correcto y lo que debo representar ahora mismo…
Hablando de feminismo, también has ilustrado a Carlota Corredera… ¿Cuál es la siguiente telecinquera?
(Se ríe). No quiero representar solamente a gente muy famosa. También me gustaría ilustrar a periodistas que han apoyado al programa de ‘Rocío, contar la verdad para seguir viva’ o que, gracias a ellos, yo he descubierto otro tipo de testimonios que me parecen interesantes.