Paula González siente absoluta admiración por su progenitor, sin embargo, nunca antes había presumido de él en las redes sociales. Hasta ahora, que la ganadora de 'Gran Hermano' ha sorprendido a todos posando por primera vez junto a su padre, con el que mantiene una estrecha relación paternofilial. Una instantánea que, además, ha servido a sus seguidores para comprobar el gran parecido que guardan entre ellos.
Con tan solo 14 años, y tras una historia familiar de lo más delicada marcada por la mala relación con su madre, la catalana decidía abandonar el nido y poner rumbo a Hawái para marcharse a vivir junto a su padre, que siempre ha sido su figura referente.
A pesar del profundo amor siente por su padre, la que fuera ganadora de 'GH 15' no suele compartir en redes este tipo de posados más familiares. Sin embargo, la joven se encuentra en pleno retiro espiritual en su adorada Costa Rica, donde tiene una espectacular mansión desde la que disfruta de sus periodos vacacionales desde este exótico destino.
Un viaje que, tras el fallecimiento de su abuela, le ha servido para encontrar la paz interna que tanto anhelaba. Además, se trata de un lugar de lo más especial para ella, pues fue allí precisamente donde pasó junto a ella los primeros meses de la pandemia.
Ahora, la joven se ha reencontrado allí con su padre, que es otro de los pilares fundamentales de su vida. A través de su perfil oficial de Instagram, la de Barcelona ha compartido una preciosa fotografía que ha hecho las de sus fans, que siempre han sido conocedores de lo importante que es para Paula su padre.
"Mi padre, todo un guaperas", ha escrito la exconcursante de la decimoquinta edición de 'Gran Hermano', que ha presumido por primera vez de la belleza de su progenitor, junto al que disfruta de unos días de desconexión desde su particular paraíso en Costa Rica.
Una entrañable estampa que, además, deja bien claro que la influencer ha heredado muchos genes de su progenitor. Y es que Paula González y su padre son como dos auténticas gotas de agua. Ambos con ojos claros y grandes, labios carnosos, nariz perfilada, rostro anguloso y un gesto de serenidad innato en ellos.