Dani Santos se convirtió en uno de los '+1' de su edición. No entró como todos los concursantes, sino que lo hizo en la décima gala, por lo que estuvo mucho menos tiempo viviendo la maravillosa experiencia de 'Gran Hermano'. Sin embargo, el que fuera hasta la fecha el primer y único concursante procedente de Burgos, pronto logró con sus locuras ganarse el cariño del público. Tanto es así que llegó hasta la mismísima final, aunque el codiciado maletín finalmente terminara escapándosele de las manos.
En aquel momento tenía 19 años y era estudiante de arquitectura. Su entrada en la casa de Guadalix de la Sierra le cambió la vida, algo que él mismo reconoce y asegura que de no haberse presentado es probable que hubiese terminado la carrera y encontrado un trabajo estable. Pero quiso probar suerte y tampoco le ha ido nada mal.
Su andadura televisiva no terminó ahí y, poco después se animó a participar en 'Gran Hermano la Revuelta'; al año le vimos algo atemorizado como participante de 'Mira quién salta' y, en 2016, volvió a meterse en la casa de Guadalix como concursante del 'GH VIP' de Laura Matamoros y Carlos Lozano. Este fue el último reality del burgalés, quien hace un tiempo explicaba a 'Outdoor' en una entrevista que, tras su expulsión, estuvo recibiendo numerosos ataques e insultos por haberse enemistado con el ex de Miriam Saavedra y Mónica Hoyos. "En Twitter tenía insultos cada 15 segundos y era como el horror. He vivido los dos lados de la fama", aseguraba.
Apasionado de la arquitectura y con ganas de ir a 'Supervivientes'
En redes sociales no es muy activo, aunque sigue siendo igual de presumido que hace 8 años. A pesar de no haber terminado aún sus estudios de arquitectura, Dani Santos es un apasionado de los edificios clásicos. Así, en su cuenta personal es fácil encontrarle (posando) frente a Catedrales, su debilidad, como la de Cádiz o la de Jerez; así como otros monumentos, como la renacentista Fuente Grande de Noblejas, Ocaña.
Ya hace dos años decía que no había conseguido acabar su carrera porque siempre, cuando se encontraba en su mejor racha de estudios, acababan ofreciéndole participar en algún reality. Sea como fuere, parece que a Dani Santos no le importaría dejar de nuevo apartada su carrera. Y es que, tal y como comentaba él mismo hace tan solo unos meses en una reciente entrevista con el portal Fórmula TV, le encantaría volver a participar en un show de telerrealidad.
Concretamente en Supervivientes, formato en el que lleva años intentando 'colarse en el casting' aunque nunca le han llamado para ir. Su teoría es, que no le llaman no porque no dé juego, sino porque está 'demasiado delgado' y cree que la organización puede pensar que no aguantará las extremas condiciones del concurso. "Temen que me vaya a ir por lo delgado que estoy pero, de verdad, luego tengo muchísimo aguante", decía postulándose como participante para la edición de 2021.
Una vida 'muy ajetreada'
Dani considera que lleva una vida 'súper ajetreada' y que siempre está andando de 'acá para allá'. Hace años que se mudó a Madrid, ciudad en la que reside y en la que compagina sus estudios de arquitectura con otros trabajos. En la actualidad no sabemos a qué se dedica, pero al menos hace unos años era dependiente de una conocida línea de moda de la cadena Inditex.
Además, por aquel entonces también ayudaba a su familia, poseedora de un pequeño hotel y de una finca rural en Burgos, a la gestión de las reservas. Entonces probaba también suerte en Youtube, plataforma en la que intentó hacerse un hueco compartiendo un canal con una amiga, aunque lo cierto es que su faceta como 'youtuber' apenas duró unas semanas y tras seis vídeos publicados abandonó este proyecto.
A pesar de esta 'ajetreada' vida que tiene, Dani Santos, uno de los concursantes más divertidos de 'Gran Hermano', continúa teniendo tiempo para presumir de su particular y característico sentido del humor. Algo que lleva también a su faceta profesional, donde como proyecto universitario en el que tenía que realizar el diseño de un producto – aún no entendemos muy bien la relación-, se le ocurrió lanzar un ambientador para coches con forma de cinta de cassette al que bautizó con el nombre de CAR-Mela, en honor a Camela, grupo del que era muy fan hasta hace poco.
El resto del tiempo que tiene libre, le gusta aprovecharlo para quedar con sus amigos o con su familia, a quienes por las fotografías que publica parece estar muy unido. En lo que respecta a sus compañeros de televisión, Dani continúa teniendo bastante relación con algunos de ellos. Especialmente con María, la jerezana, y con su pareja, Hugo (también de GH 12 + 1), con quienes habría pasado unos días este verano tal y como muestran algunas de sus publicaciones de Instagram.
Con Laura Campos, con quien compartió casa en el VIP, también tiene alguna que otra fotografía en su perfil, así como con Ariadna Sánchez (la hija de Fortu que también participó en el 12+1).