La reinvención de Miriam Sánchez: vendió sus implantes mamarios y quiere ser actriz
“Vendo mis implantes de silicona a pornófilos, fans de Lucia Lapiedra. Son sus tetas. Las envío por correo por 500 euros. ¿Quién da más?”. Así vendía Miriam Sánchez sus prótesis, y dada su extensa carrera en la industria del cine X (mundialmente reconocida como Lucía Lapiedra), la catalana no tardó en ser contactada por varios interesados. Entre ellos, un joven llamado Rafa. “Empezó como una broma, pero cuanto más lo pensaba, más me apetecía tenerlas. Además, hablando con Miriam por privado me cayó bien y descubrí a una mujer encantadora, más allá de su imagen pública. Según me dijo, me eligió a mí porque fui el que más confianza le dio”, explicó el fan recientemente a 'Vice'.
A sus 36 años, la ex de Pipi Estrada se sometió a la intervención quirúrgica a principios de junio y completó la compraventa. “Me las envió por correo certificado y le hice una transferencia bancaria. Ahora tengo los implantes expuestos en mi habitación. Cada vez que vienen visitas, los guardo, aunque intento evitar que los toque nadie”, manifestó el comprador, que tiene las prótesis plastificadas para que no se deterioren. Por su parte, Sánchez quedó más que satisfecha con el cambio, ya que no dudó en enseñar su renovada delantera en Twitter: pasó de una talla 110 a una 85.
Son las primeras noticias que llegan de Miriam en muchos meses y eso que acaparó numerosos titulares durante sus más de diez años colaborando en espacios de Telecinco. Ahí quedan para la posteridad sus intervenciones en 'Crónicas Marcianas' y 'TNT', sus consejos como asesora del amor en 'Mujeres y Hombres y Viceversa''Supervivientes', ganando la edición de 2008. Sin embargo, parecen momentos pertenecientes a una etapa pasada de su vida, porque quiere empezar una nueva andadura profesional sin escándalos ni habladurías.
De rodaje con la madre de Alaska
Sin sus pechos de silicona –aguantaba dos implantes de 550 centímetros cúbicos–, la catalana desea que se la tomen en serio como actriz convencional. Desde 2013 lleva realizando cursos en escuelas de interpretación, donde también viene dando clases de canto. En abril de 2015, dos años después de cambiar de rumbo laboral, Miriam Sánchez debutó en el teatro con la obra ‘Love Is In The Air’. Después hacer obras de Microteatro, rodó en 2016 ’Cosmética Terror’ a las órdenes de Fernando Simarro. Trabajó con Josele Román en esta comedia, que cuenta con delirantes cameos de Regina Do Santos, Carolina Sobe, Malena Gracia, Yola Berrocal, Paco Clavel y la mismísima madre de Alaska, América Jova. La película se acaba de estrenar en el Pequeño Cine Estudio de Madrid y se mantendrá en su cartelera a lo largo de todo el mes de junio.
Aunque no le está resultando fácil hacerse un hueco en el mundo de la interpretación, Miriam se resiste a retomar el camino fácil. “La han llamado muchas veces para ir a 'Sálvame'. Hace poco también para comentar en el 'Deluxe' las novedades de 'Supervivientes' en calidad de ganadora. Ella se niega a ir”, cuenta su entorno a ‘Outdoor’, que añade que es una decisión inamovible. Mientras le sale su gran oportunidad para rodar lejos del porno, la barcelonesa sigue realizando bolos en discotecas de toda España. De hecho, en las próximas semanas visitará Tenerife y Las Palmas.
Sus sesiones con el psicólogo
En esta reinvención, Sánchez ha necesitado ayuda terapéutica. “He ido al psicólogo y me ha enseñado a quererme y a saber realmente lo que quiero. Quiero ser actriz. En esta nueva etapa estoy pletórica”, ha confesado a 'Qué Me Dices'. “Llegó un punto en el que me di cuenta que no hacía las cosas porque yo las quisiera hacer sino por los demás o, a veces, por dinero. Ahora me pagan menos haciendo bolos o presentando fiestas en los pueblos, pero soy feliz”, ha añadido a la misma revista.
Salida del foco mediático, Miriam lleva sus asuntos personales con total discreción. Tanto es así que no hay apenas fotografías en las redes con Cristo Vivancos, uno de los miembros del grupo de baile Los Vivancos, con el que sale. Ni las sube él ni ella. Esto ha hecho que algunos medios hayan especulado sobre su situación sentimental. Sin embargo, tal y como confirma su círculo de amistades a ‘Outdoor’, Miriam continúa su noviazgo con Cristo y ambos comparten techo en un piso situado en la zona de Las Tablas, al norte de Madrid. Junto a ellos vive la hija que la barcelonesa tuvo durante su relación con Pipi Estrada, quien también reside a escasos metros de la casa de Sánchez. Aunque rompieron en enero de 2013, Miriam y Pipi mantienen tan buena relación que suelen hacer planes de ocio con Cristo, el novio de la antigua estrella del porno.