Para muchos Oto Vans es un gran desconocido pero sólo hay que pasearse por su perfil de Instagram (donde acumula más 340 K de seguidores) para descubrir que el concursante de 'Supervivientes' es una auténtica estrella. Porque con un sólo vistazo te puedes dar cuenta que Oto aprovecha las redes para reírse de los heteros, maquillarse maravillosamente bien y meterse con todo el que no la entienda, pero siempre desde el respeto y defendiendo la libertad, la suya, no la impuesta por la sociedad.
Pero ¿realmente conocemos al verdadero Oto? Su familia, su barrio, la 'complicada' relación con su padre en la infancia y sus inquietudes: todo está recopilado en un canal de Mtmad, en el que ha intentado explicarnos a golpe de vídeo 'qué la pasa', y nosotros lo hemos rescatado. Eso sí, si pensábias que lo sabíais todo de él, estáis muy, muy equivocados. Ácido, deslenguado, sincero y coqueto, pero mucho más... Descubrimos a Oto Vans.
Oto es de origen croata pero, a los cuatro años de edad, se vio obligado a dejar su país para evitar que los servicios sociales separasen a su familia fruto de la adicción a las drogas de sus padres.
Así, su madre llegó a Vitoria tras un viaje en coche de varios días, que en principio tenía como destino Portugal. Allí se instalaron por 14 años ya que sus padres empezaron a trabajar en un centro de desintoxicación. "Afeminado, amanerado y con un corazón enorme", así es Oto Vans en palabras de su madre, tal y como recogimos hace unas semanas, en unas sinceras palabras que la madre del croata daba a 'Look', en las que confirmaba cómo habían sido todos esos años en el centro y sus inicios en Vitoria junto a sus pequeños, entre ellos, Oto.
A su llegada a España, la familia de Oto se internó en un centro de rehabilitación, en el que trabajaban sus padres, en el cual vivió durante catorce años.
Fue en esta época de su vida en la que Oto estuvo tan aislado del exterior que incluso ha reconocido las pocas amistades que tuvo en su infancia, donde internet o las redes brillaban por su ausencia. Incluso en uno de los vídeos de su canal para 'Mtmad', Oto hablaba de esos años dentro del armario donde su mirada inocente le llevaron a confundirse: "De pequeño creía que si me gustaban los hombres era porque quería ser una chica". Si quieres saber como vivió su salida del armario, no puedes perderte este vídeo:
Oto tiene 5 hermanos y si pensabas que la relación que tienen es diferente al resto de los humanos estás muy equivocado. Precisamente en su canal de Mtmad pudimos ver que Oto se pelea, bromea con ellos ¡y hasta les pone motes! Pero, sobre todo, el croata se desvive por ellos y le encanta pasar tiempo con su familia en su "barrio" de Vitoria. ¡Oto en versión rural y andando por el campo con sus hermanos! ¿Alguien da más?
Pero también tenemos la versión familiar de Oto en su casa junto a 3 de sus hermanos, los más pequeños, a los que llama, La Hetera, La Gafas y La Gorda (tiene para todos ellos):
Salirse del canon heteronormativo y de género binario es algo que el padre de Oto no llevó nada bien desde el principio. Oto siempre se sintió atraído tanto por los hombres como por actitudes consideradas más femeninas, que provocaban la mirada conservadora de su padre. Vans afirmó en una entrevista para 'Yasss' que llegó incluso a encararse con él porque no le dejaba comer helados rosas o por maquillarse, a lo que Oto contestó que "se maquillaría más que su propia mujer".
"Mi padre toda la vida me ha tenido ultra reprimido, no me dejaba ni comer frigopies porque eran rosas. No me dejaba entrar en casa maquillado, me daba las toallitas y no podía cruzar la puerta hasta tener la cara limpia. Me rebelé a los dieciocho y fue cuando empecé a darme cuenta de que este mundo es el mío. Ahora gano más dinero que mi padre y no me puede decir nada. Es lo que hay", afirmaba Oto en la misma charla con 'Yasss'.
Esta barrera entre ambos ha lastrado su relación, con Oto sintiéndose más cercano a su madre, aunque él mismo ha reconocido que sus padres no están separados. En este vídeo se puede ver la relación real que tiene con su padre, con 'peleilla' incluida:
Oto es su nombre real pero usa Vans como apellido artístico porque estuvo obsesionado con esas zapatillas. Y prefiere llevar la cara lavada pero ha estado dos horas maquillándose.
Si algo ha catapultado a la fama a Oto Vans ha sido su sinceridad y su manera propia de hacer suyo cada contenido que ha colgado en Internet. Tanto es así que todos los jóvenes de una generación podemos agradecerle a él todos los 'sí, ¿por? y 'qué la pasa' que hemos pronunciado en cualquier situación cotidiana.
Oto se define a sí mismo como 'influencer' realista, y no se ha cortado en alguna ocasión en criticas situaciones idílicas más propias de figuras como Dulceida. El concursante de 'Supervivientes' tiene más de 340 K de seguidores en Instagram y cuenta con un canal en Youtube con más de 130.000 suscriptores enganchados a sus trucos de maquillaje y su manera deslenguada y sincerada de ver la realidad.
Porque Vans no duda en reflejar sus mejores momentos, pero también sus peores, y lo hace desde la sinceridad. Lo mismo relata su primera vez en el sexo que alguna de las agresiones sufridas en su día a día o se pasea por un lugar de 'cruising' famoso en Madrid para enseñarlo a todos sus fans:
El joven no ha dudado en inyectarse bótox en la frente con el fin de evitar "arrugas por fruncir el ceño" para estar perfecto antes de empezar el reality. Además de esto, Oto también ha comentado en sus redes antes de saltar del helicóptero que se ha hecho un tratamiento de queratina en el pelo con el fin de que se mantenga liso. No nos sorprende, es el auténtico Oto.
Pero la historia de Oto no es la de un niño afeminado con miedo a salir del armario, que también, es la de alguien que se enfrentó a los que le hicieron bullying, que se negó a obedecer lo que su padre quería y que se ha comportado como un auténtico superviviente, no de una isla sino de su propia vida REAL. El croata es todo un ejemplo de amor para y con su madre, hermanos y amigos, y lo que realmente 'LA PASA' da para un libro... pero, por ahora, tiene este artículo.