Kiko Rivera, orgulloso de su bajada de peso: "Ya se me ve el cuello"

Kiko Rivera tiene desde hace años problemas con su peso. El hijo de Isabel Pantoja llegó a someterse a un balón gástrico para eliminar los kilos de más que tenía, sin embargo, con el paso del tiempo el Dj acabó sufriendo efecto rebote. La cuarentena y el confinamiento no sentaron tampoco sentaron nada bien al cantante, que continuó engordando y decidió ponerse a dieta y empezar a hacer ejercicio. Los resultados por fin se van notando y Kiko no puede estar más contento.

Aunque de un tiempo a esta parte Kiko no hablaba de su forma física ni peso, en los últimos meses sí que se le nota bastante más deshinchado. Tanto es así, que él mismo ha querido compartir orgulloso con sus seguidores su logro, remarcando que ya no tiene tanta papada como antes. "¡Ya se me empieza a ver el cuellito! Vamos, que nos vamos. Seguimos activos", dice mirando a cámara. "Aquí estoy ya, ¡con cuello, con cuello!", añade en sus stories mientras señala esta zona de su cuerpo.

En julio de 2020 Kiko Rivera pesaba 90,8 kilos. "Buenos días, seguimos activos. El miércoles que viene me peso otra vez, ¿bajamos o no?", escribía en su foto junto a la báscula. Entonces, el Dj reconocía haber cogido bastante peso y aseguraba que ya estaba "en proceso de quitárselos". Por el momento, Kiko Rivera no ha desvelado cuánto pesa a día de hoy, sin embargo, sus últimos stories son la prueba de lo contento que está.

La operación bikini de los Pantoja

En todos estos meses que han transcurrido desde el pasado verano, y que han estado indudablemente marcados por el conflicto familiar con su madre, a quien recientemente lanzaba un duro reproche por el Día de la Madre, no sabemos si Kiko ha seguido a dieta o no. En cualquier caso, lo cierto es que todo apunta a que su intención es continuar adelgazando y ponerse a tono de cara al próximo verano.

Por el momento se desconoce cuál es el objetivo de Kiko Rivera y cuántos kilos quiere perder para verse bien. Hace un par de años y gracias a un estricto cambio de hábitos de vida entre los que se incluían alimentación saludable y deporte, el hijo del difunto Paquirri logró perder hasta 42 kilos. Esto, unido al balón gástrico que se puso, hicieron que Kiko lograse una figura como nunca antes se le había visto.

Pero Kiko no ha sido el único Pantoja que ha decidido hacer algo al respecto con su peso y con su cuerpo. Su prima, Anabel Pantoja, también ha querido deshacerse de los kilos de más que engordó durante el confinamiento y tras su rotura de peroné. No obstante, en su caso, la sobrinísima decidió recurrir a la cirugía estética y someterse a una liposucción tras la que ha perdido 8 kilos.