24 noches. Ese fue el tiempo que pasó Jordi Sánchez intubado y en coma a causa del coronavirus. Media España estuvo en vilo por la salud del queridísimo actor de 'La que se avecina', que desde hace unos días ha recuperado la normalidad después de superar este trance vital. Así nos lo está haciendo saber él mismo a través de sus redes sociales, donde siempre ha tenido palabras de agradecimiento tanto para el equipo de profesionales de la Fundación Jiménez Diaz, centro donde estuvo hospitalizado, como a los miles de amigos y gente anónima que, sin conocerle de nada, le hicieron llegar su cariño en ese pasado reciente en el que su vida corrió peligro.
Ahora que está "disfrutando de la vida", en su casa y con los suyos ("algo que deseaba con locura"), el intérprete ha podido verbalizar cómo fue esta experiencia tan desagradable en una entrevista para Catalunya Ràdio. En ella ha contado que, en un principio, cuando dio positivo en covid-19, jamás imaginó lo que sucedería después.
"Los primeros días son como una gripe. Yo tampoco tuve mucha fiebre, pero no terminaba de encontrarme bien", ha explicado. Después de estos síntomas, la enfermedad desencadenó en una neumonía que derivó en un coma del que recuerda como "vivir en un mundo paralelo durante 24 días".
"Estás tan drogado que todo lo que sueñas te parece real. Es terrible. Pierdes la noción del tiempo y alucinas. Las alucinaciones son más fuertes que los sueños", ha manifestado Jordi en estas declaraciones, las primeras en las que narra su experiencia.
Como ejemplo de este estado tan "desagradable", el actor que da vida a Antonio Recio ha confesado que llegó a creer que uno de sus hijos había muerto. "Estaba triste y hecho una mierda. Hasta el tercer día no me atreví a preguntar si lo que había soñado era verdad. Luego me dijeron que no y me puse a llorar. Incluso llegué a hacer los papeles para enterrar a mi hijo", ha relatado.
Según pasaron los días, tal y como comunicó su familia de forma oficial, el protagonista de 'La que se avecina' fue evolucionando favorablemente. Pero no fue tan fácil volver a ser el que era. "Cuando me despertaron no podía ni caminar ni hacer nada, ni siquiera escribir. A los dos días ya escribía y a los cuatro ya caminaba", les ha contado a los compañeros de Catalunya Ràdio.
En cuanto a cómo se contagió, Jordi Sánchez está convencido de que fue durante el rodaje de su última película, donde cree que también hubo más positivos. "Nos ponían el palito por la nariz y nos miraban con lupa, pero hay un momento en el que tienes que trabajar sin mascarilla. Cuando te la quitan no sabes si la persona que tienes delante está contagiada o no", ha justificado.