La primera edición de 'Gran Hermano' fue el origen de la telerrealidad: audiencias desorbitadas, una Mercedes Milá hablando de “experimento sociológico” y un grupo de jóvenes dentro de una casa, ubicada en Guadalix de la Sierra, que consiguió pegar al espectador a la pantalla 24 horas.
Precisamente un reserva, Íñigo, acabaría convirtiéndose en uno de los “grandes hermanos” más queridos. Con el estudiante de Filología Inglesa hemos charlado para que nos cuente cómo es su vida actual como profesor interino en Granada, qué relación tienen los concursantes de esa edición y qué opina de la actual edición de 'GH VIP'.
¿Cómo te encuentras? ¿A qué te dedicas?
Estoy absolutamente feliz. Hago lo que más me gusta siendo profesor de la Escuela oficial de Idiomas de Granada. Tengo un horario donde puedo hacer otras cosas y no tengo ningún síntoma de estrés, a pesar de que en ocasiones quieran ponerme zancadillas en mi camino. No sabes la de bandazos que he dado en la vida y por eso ahora estoy en pleno apogeo de felicidad.
Con mi situación actual no sabes cuantos cortes de manga he hecho a tanta gente. Después de tantas habladurías, tantas gilipolleces y tantos desplantes que me han hecho en estos últimos 19 años, ahora mismo soy yo el que me río de todos ellos. Me han llegado a decir, en las puertas de la Universidad de Sevilla, que qué hacía estudiando con 35 años. También en Twitter, cada vez que entraba en una biblioteca, la red se mofaba diciendo cosas como: “Ha llegado el fin del mundo, Íñigo de ‘GH’ entrando en una biblioteca”.
¿Qué te aporta la docencia?
Ha conseguido que me olvide del Periodismo. Ha conseguido romper los pájaros que tenía en mi cabeza, en mi insistencia en ser periodista. Yo fui periodista hasta donde me dejaron ser, intenté engancharme con un Máster en Dirección de Comunicación, 4.000 euros que no sirvieron para nada.
La docencia me aporta un conocimiento fundamental para progresar como ser humano. Yo entro en clase y me siento feliz. Hablo con los alumnos, me cuentan sus inquietudes y bajo este clima y atmósfera tan agradable hay un denominador común: la enseñanza, el aprendizaje y el conocimiento.
¿Crees que se puede vivir de ser ex concursante de ‘Gran Hermano’?
Es de locos querer vivir toda la vida de un programa de televisión, no tiene sentido. ¿Tú puedes decirme quién vive toda su vida de la tele? Fíjate los grandes de la historia de la televisión, muchos de los que están, viven de las migajas.
¿Y quisiste vivir de la tele?
Yo quise vivir de la tele, pero porque me llenaron la cabeza de cosas que podía hacer y ganar. Estaba dejando de ser persona, a tener la personalidad de una mesa camilla, era un ser vulnerable que se tragaba todo lo que ponían y decían. Me engañaron mucho y sacaron de mí todo lo que ellos creían que podrían sacar. De mí se perdieron tantas cosas, que ahora estas cosas las disfrutan mi familia, mis amigos y mis alumnos. No necesito ni a la tele ni a nadie más.
El hecho de ser famoso de la noche a la mañana empezó con ‘GH’… ¿Cómo ha repercutido todo esto a toda una generación?
Por culpa de nuestro éxito hemos creado monstruos, personas cuya única obsesión es salir en televisión. Y yo los entiendo, empatizo con ellos. Ganan mucho dinero sentándose en un plató. Se crean ‘Sofías’ adolescentes con las hormonas por las nubes y que venden de todo por permanecer en televisión.
Pero creo que estos seres no tienen la culpa de los que les ocurre. Desde mi punto de vista, Sofía es una copia barata de Ylenia y bueno, la madre, mejor me callo, que se cargó el anticlub de ‘GH 17’.
Si volvierais a entrar todos los concursantes de la primera edición de 'GH' ¿Cómo crees que os llevaríais?
Volvería a intentar ligarme a Ania (se ríe). Es broma. Además ella se va a casar el próximo año y espero que me invite. Yo aclararía muchas cosas porque han surgido muchos malos entendidos a lo largo de estos años. Gracias a María Teresa Campos muchos hicimos las paces y la verdad es que lo agradezco porque nunca me ha gustado estar mal con nadie.
Estaría bien reunirnos, porque la nostalgia está de moda, pero no sé hasta qué punto nos juntaríamos los 14, creo que es una misión imposible. Es realmente difícil. Yo hace muchos años que no sé de muchos de ellos. Quizá saltarían chispas en este reencuentro histórico porque nunca se ha hecho.
¿Tenéis grupo de WhatsApp?
Sí, tenemos un grupo desde el año 2016, gracias al reencuentro que organizó la gran María Teresa Campos. No estamos todos, la verdad. Pero gracias a este grupo, tenemos contacto, creo que si no llegamos a tenerlo, apenas tendríamos contacto. Es cierto que con Jorge tengo mucha relación y estuve en su casa antes de mi trabajo en Varsovia.
También tengo relación con otros grandes hermanos como Patricia ‘GH3’ y Carola ‘GH2’ y con Raquel Abad de ‘GH7’, que fui su profesor de inglés pero cuando me fui al extranjero dejamos de vernos.
¿Qué queda del trío Ismael – Iván – Íñigo que conquistó a la audiencia?
Del trío, los primeros años hablábamos muchísimo, pero luego se fue esfumando con el paso del tiempo. Ahora mi relación con ellos es sólo por WhatsApp y con Iván, además, he hablado por Facebook. Me gusta verlos como triunfan en sus vidas.
¿Qué recuerdas de tu paso por ‘Gran Hermano’?
Me lo pasé fenomenal, disfrute mucho y no me arrepiento de haberlo hecho. Di bastante juego y generé muchos videos, entonces fue un papel importante dentro de esa complejidad de la casa. No me hubiera gustado haberlo vivido desde el principio porque pienso que había carácteres muy fuertes que hubieran anulado mi fuerte personalidad, por lo tanto entré cuando tuve que entrar con mis virtudes y defectos. En eso mi personalidad tuvo mi recompensa, porque el primer año trabajé muchísimo en la televisión, "Quédate conmigo" "Crónicas Marcianas" y además la productora y Telecinco confió en mí para entrar en la primera edición VIP del reality cuatro años más tarde.
¿Con quién no tienes relación?
No tengo relación con Nacho, Vanesa, María José y Mónica.
En tu participación en 'GH VIP' nos dejaste momentos muy divertidos ¿Ves actualmente las nuevas ediciones?
Ahora mismo vivo con gente que no había ni nacido cuando estaba en ‘Gran hermano’, así que fíjate lo que saben ellos de mi edición. Este VIP la estoy viendo pero apenas puedo escucharlo porque somos 16 en un salón e imagínate 15 adolescentes y un puretilla cuarentón viendo ‘GH’, no se ve apenas y las tramas que se forman, no son especialmente apreciadas, por lo tanto está como fondo del salón.
Las ediciones anteriores no las he visto porque trabajaba como profesor de español en el extranjero. Cada vez veo menos la televisión.
¿Cómo recuerdas tu experiencia en el VIP?
Sobre mi experiencia en ‘GH VIP’ lo que si me gustaría destacar es que me sentí un poco incómodo, mis propios prejuicios me ahogaron, jugué fatal, me dejé eliminar. Las locuras de Flor me incomodaban y la sensación de libertad que tenía en GH, no la tuve en ’GH VIP’.
¿De la edición VIP mantienes relación con algunos?
Realmente con ninguno, pero si he tenido contacto con Rosa, que es una maravillosa persona, durante mis estudios de Periodismo tenía mucha relación con ella. Me ha entrevistado un par de veces en el programa de Radio que tenía en Punto Radio.
Por otro lado, con Yolanda Mora también he tenido relación, me ha escrito de vez en cuando por Whatsapp y vino a la presentación de mi libro "Mercenarios de la tele". Marta López alguna vez me ha llamado para hacer algo de su Twitter. A Juan Camus lo entrevisté en el 2012 para mi libro y al principio me llevaba fenomenal con él, al salir de la casa. De los demás no sé nada. Pero sí que me gustaría tener un reencuentro con ellos, pero que no sea televisivo, simplemente una cena o un almuerzo.
Hemos visto que tienes pareja… ¿Os habéis casado? ¿Tenéis algún hijo?
En Polonia me eché una novia, pero era tan celosa que ella me acusó de muchas cosas y mi relación con ella era muy parecida a lo que le ocurría a Michael Douglas con Glenn Close en la película "Atracción fatal". Es muy celosa, me miraba los whatsapps, me tiró el teléfono, me echó de casa, vamos un culebrón al más puro estilo Dinastía. Al final la relación acabó.
No tengo hijos, pero tengo una familia maravillosa, unos sobrinos segundos increíbles con los que disfruto en verano y mi hermano pequeño me ha dado un maravilloso sobrino.
Y también sabemos que has perdido 20 kilos... ¿Cómo lo conseguiste?
Pues es cierto que perdí muchos kilos y lo conseguí bebiendo muchos vasos de agua caliente y dejando de comer. Lo que pasa que me confié y cuando me fui a vivir a Varsovia me puse a comer pieroguis por un tubo. La vida social lleva a un refresco, una cerveza, etc.. y eso y dieta no son compatibles. Ahora no sé en cuanto estoy, pero estoy más gordito que hace dos años, pero soy muy feliz así.
Has escrito dos libros, ¿te gustaría seguir escribiendo?
En un futuro me gustaría seguir escribiendo, pero ya de otro aspecto que no tenga nada que ver con la televisión. Ahora quiero seguir viviendo y escribir te quita mucho tiempo.