Lo que para Gloria Camila era en su día algo para toda la vida, eso ha cambiado con el paso de los años. La hija de Rocío Jurado y José Ortega Cano mira al presente y trata de no atarse a nada. Un buen ejemplo de ello es lo que hasta ahora lucía en su piel y que ha decidido ahora eliminar. La hermana de Rocío Carrasco ha probado una técnica avanzada para eliminar uno de sus tatuajes más representativos.
Arrepentida o no, Gloria Camila ha tomado una decisión y, lo que hace años lucía orgullosa en las playas de 'Supervivientes', ahora formará ya parte del pasado. Para ello, la influencer ha acudido a una clínica especializada que ha publicado el vídeo en el que se ve la técnica que utilizan para que ese dibujo en la piel quede solo en un recuerdo.
En concreto, la joven ha seguido los pasos de su ex, Kiko Jiménez, y ha decidido quitarse un tatuaje que lleva en el brazo y que tiene una frase muy representativa. Lo que hasta ahora se podía leer en la piel de Gloria Camila y que ponía "Nothing last forever" (Nada dura para siempre) ha sido como si fuera un anuncio de la intención que tenía la hija de Rocío Jurado.
Desde siempre, a la colaboradora de 'Ya son las ocho' le han encantado los tatuajes y ha llevado varios en su cuerpo: algunos dedicados a sus familiares, como las siglas 'RJ' (Rocío Jurado, dedicado a su madre) o uno que tiene con su sobrina, Rocío Flores, y los que se hizo cuando estaba saliendo con Kiko Jiménez. No sabemos si de esa última etapa será este último, pero lo cierto que es una forma de romper con el pasado lo que ha optado por hacer Gloria Camila.
A través de una "técnica segura" y con la posibilidad de volver a lucir en el mismo sitio otro dibujo o letras, la hija de Rocío Jurado y Ortega Cano ha confiado en el láser para eliminar este tatuaje. Según decía lo que llevaba tatuado en su piel, "nada dura para siempre" y a la espera ahora de ver el resultado final, dado que la influencer tiene que pasar por varias sesiones, parece que esa es la lección que ha dado a entender.
Un mensaje que algunos han visto con doble intención poniéndolo en relación con el conflicto de Rocío Carrasco o, tal vez, un recuerdo demasiado presente de su antigua relación. De cualquier forma e independientemente del motivo que sea, Gloria Camila parece que se ha arrepentido de llevar siempre esa frase escrita que próximamente habrá desaparecido de su vida.