'Bailando con las Estrellas' ha regalado a su audiencia otro momentazo de esos de "madre mía, madre mía" que diría Adara Molinero. En este caso ha venido de la mano de la pareja conformada por Elena Tablada y el bailarín Adrián Esperón. Resulta que el profesional no quiere seguir ejecutando coreografías con al ex de David Bisbal y quiere formalizar su separación con la diseñadora. ¿Qué habrá pasado entre ellos? Mientras nos enteramos, nada mejor que profundizar en la vida de este nuevo personaje Outdoor.
El acompañante de Elena Tablada no es un bailarín cualquiera: se trata nada menos que de un profesional de la danza con un interesante palmarés en competiciones de ámbito nacional y europeo. Además, es profesor de baile y propietario de una academia situada en Pontevedra.
En lo que respecta a su vida personal, descubrimos en sus redes sociales que en esta aventura empresarial le acompaña su novia Noemi, que también es una reconocida bailarina. Este tándem coreografo-amoroso cuenta con una larga historia común: las redes sociales de ambos nos chivan que están juntos, al menos, desde hace seis años y que pasarán próximamente por el altar: el pasado 1 de enero Adrián hincó rodilla junto al Támesis en Londres.
A pesar de que no tienen hijos, Adrián y Noemí sí tienen mascota: conviven en tierras gallegas junto a Nala, un simpático perrito que acompaña a la pareja en sus múltiples escapadas por las tierras de Rosalía de Castro. Los tres (los dos bailarines y el perro) son grandes embajadores de la van-life y el turismo camper y les encanta viajar en su autocaravana. Amantes de la montaña, el futuro matrimonio es muy amante del esquí y en su feed hay varias fotos en las que disfrutan de este deporte.
A falta de conocer los detalles del progresivo deterioro de la relación de Adrián y Elena Tablada, el historial de publicaciones de él evidencia que hubo un tiempo en en el que se adoraban. Elena se refería a su maestro como “Mi Zamburiño”. Además, una decena de fotos públicas de ambos en el estudio del concurso así lo evidencian, además de que se dedicaban piropos mutuos y ‘likes’ ad infinitum y ad nauseam.
Sin embargo, el sábado pasado todo se rompió en pedazos: Adrián pidió retirarse del programa y que el espacio facilitase un nuevo compañero de baile a la diseñadora de joyas. Parece que el mal rollo viene de lejos ya que Sheila Casas ha salido en defensa de su compañera en Instagram: “Mucho ha tenido que aguantar Elena de este señor que no se sabe, ¡no es oro todo lo que reluce! Es muy fácil decir cosas en 2 minutos de directo para quedar bien y luego la realidad es muy diferente”, comentó en el perfil de Instagram del talent de baile.
Segundos antes de esta petición formal de divorcio, Adrián le pidió perdón a Elena por sus formas “porque he puesto en práctica las tácticas que hacía cuando competía”. La semana pasada ya se sentía marejada: ‘’Son bastantes días juntos y he cambiado ahí en un momento dado en el entreno que fui un poco más severo y a ella no le gustó y de ahí derivo una cosa y otra’’. En los vídeos de los ensayos los espectadores asistieron a un recital de zascas entre ambos que evidenciaba el desgaste de la pareja de baile.