Reflexivo, feliz y sin pelos en la lengua. Así se encuentra José Antonio Avilés tres años después de su salto a la fama. El polémico colaborador de ‘Viva la vida’ ha hablado en exclusiva en una entrevista para Outdoor de su relación con el clan Campos y ha aprovechado la ocasión para detallar cómo es su relación con Alejandra Rubio. Ambos han mostrado la complicidad que tienen delante de las cámaras pero, ¿cómo es la nieta de María Teresa Campos entre bambalinas?
Y no solo eso. A unos días de recibir noticias acerca de la segunda temporada de la serie documental de Rocío Carrasco, José Antonio Avilés ha reflexionado sobre el divorcio de Antonio David Flores y Olga Moreno. Además, el andaluz ha hablado alto y claro de en qué punto se encuentra su relación con Rocío Flores tras su alianza en ‘Supervivientes 2020’.
P: ¿En qué momento te diste cuenta que querías dedicarte a la comunicación?
R: Desde siempre me ha gustado el cotilleo, lo llevo en la sangre. Yo recuerdo que me gustaba contar cosas de los demás e informar. Además, he tenido que luchar mucho para llegar a dedicarme a lo que siempre había soñado. De pequeño sufrí bullying en el colegio y me llamaban ‘el maricón chismoso’. Llega un momento en el que te revelas contra toda esa gente que tanto daño te ha hecho y te propones triunfar. Y mira donde he llegado. Ahora estoy chismorreando pero de verdad.
P: ¿Cómo surgió la primera oportunidad de aparecer en la pequeña pantalla?
R: Había una televisión en mi pueblo y no tenían muchos recursos. Por aquel entonces, a mí me dieron la oportunidad de ser reportero allí. Yo iba a las fiestas de los pueblos y cubría lo que pasaba. Recuerdo con mucho cariño esa época. Me divertí y aprendí muchísimo. Pero este no fue el paso definitivo a aparecer en pantalla como me conocéis ahora.
He trabajado duro para conseguir estar donde estoy. Estuve de freelance en Vanitatis y coincidiendo con la baja de una compañera pude quedarme allí más tiempo cubriendo noticias de Andalucía. Mientras trabajaba allí, Luis Rollán me aconsejó que probase en la televisión. Y así surgió todo con 18 años recién cumplidos. Me estrené en TVE con la separación de Manuel Benitez ‘El Cordobés’ y estuve allí todo el verano.
Más tarde, me surgió la posibilidad de colaborar en ‘Espejo Público’, donde comentaba sucesos pero era algo que no me llenaba. Entonces, cogí y llamé a Raúl Prieto para que me diera una oportunidad en ‘Viva la vida’ aún sabiendo que era amigo íntimo de mi directora de esa época. Le propuse que me dejase ir con una entrevista potente para probarme y así fue. Y desde entonces estoy allí. Ahora, me estoy formando como periodista. En esta profesión todos los días se aprende algo nuevo.
P: ¿Qué tienes que decir a todos los que te acusan de buscar el foco mediático?
R: Yo entré en ‘Viva la vida’ en un momento de mi vida en el que tuve la libertad de querer ser más personaje. Mis colaboraciones en televisión han estado ligadas a un personaje que se ha creado en torno a mi persona. En la actualidad, mis prioridades han cambiado. Huyo de esa parte ya que quiero que se me reconozca por mi trabajo, no por mi vida personal. Eso sí, yo soy como me véis por televisión, no llevo ningún papel. Cuando hago bien las cosas las hago bien y cuando me equivoco pues me equivoco. Mis prontos, mis gestos y mis miradas son así. Soy yo en mi pura esencia. Podría haber ganado más dinero siendo personaje pero no quiero ese nivel de exposición. Yo quiero jubilarme en televisión, no tener una carrera de diez años y acabar quemado.
P: Una de las colaboradoras con las que más feeling tienes es Alejandra Rubio. ¿Cómo es trabajar con ella?
R: Para mí es un placer compartir plató con Alejandra. La familia Campos siempre ha sido un referente en el mundo de la comunicación. ‘Viva la vida’ me ha dado muchas alegrías y una de ellas fue conocer a María Teresa Campos personalmente y después llegar a hacer un programa juntos.
Aunque me llevo muy bien con todas, mi debilidad es Alejandra. Fue un absoluto descubrimiento para mí. Compartimos anécdotas, experiencias y cuando nos pasa algo también estamos el uno para el otro. Es una chica encantadora y me encantaría que la gente la conociese de verdad. Es ingeniosa, inteligente y multidisciplinar. Además, me parece que ella es la más Campos. Alejandra puede marcar un antes y un después como su abuela. Tiene frescura y eso al clan le viene muy bien ya que la televisión va evolucionando. El primer paso lo dio Carmen Borrego rompiendo las reglas de lo políticamente correcto y Alejandra Rubio ha rematado la faena. Podría decirse que ha reinventado la imagen de las Campos. Y gracias a su incorporación se hablará de la familia durante muchos años más. Una Campos siempre suma. Hay clanes como el de los Pantoja que no han evolucionado y que nos llevan dando lo mismo desde hace bastante tiempo.
P: ¿Hay algún colaborador que te haya decepcionado?
R: No quiero ser demagogo pero siempre que uno tiene una vivencia, ya sea buena o mala, se aprende de ello. Y esto es lo que conforma tu carrera. Nadie tiene un camino hecho, todo acaba el día que te mueres, pero en el mundo de la comunicación es un trabajo diario en el que tienes que demostrar lo que vales. Por eso, no cambiaría nada ni dejaría de coincidir con ningún colaborador por no tener afinidad.
P: ¿Cómo recuerdas tu paso por ‘Supervivientes’?
R: Creo que es una experiencia que todos deberían de vivir ya que aprendes mucho pero la verdad es que no se pasa bien: tienes hambre, echas de menos a tu familia, estás lejos de tu país… Es inolvidable por todo lo que se vive pero es muy duro. Es un reality show extremo y cuando saltas del helicóptero no eres consciente de todo lo que se viene por la adrenalina del momento.
P: Una de tus compañeras y aliadas fue Rocío Flores, ¿en qué punto se encuentra vuestra relación?
R: Estoy querellado por esta persona. No voy a hablar del tema porque está judicializado pero te puedo decir que la relación es nula. El tiempo que yo conviví con Rocío Flores fui muy feliz y nos llevábamos muy bien. La cosa se truncó cuando se emitió la serie documental de Rocío Carrasco e hice público mi posicionamiento.
P: ¿Qué opinas sobre el divorcio de Antonio David Flores y Olga Moreno?
R: Te voy a responder con dos preguntas. ¿Qué puedo pensar de una persona a la que se la ha dibujado con pruebas un perfil tan maquiavélico? ¿Qué puedo opinar de un hombre que ha utilizado durante tantos años a la prensa del corazón para hacer daño a otra? Una vez más nos utiliza para que nosotros quedemos mal. Pienso que la relación puede que estuviera deteriorada pero es mucha casualidad que todo salte cuando a él le beneficia hacer culpable a la prensa rosa de la ruptura de su familia. Antonio David Flores tiene una obsesión con Mediaset España, con cada programa y con cada uno de los colaboradores que nos creemos la versión de Rocío Carrasco. Le han pillado y no es la víctima que nos ha mostrado durante veinte años. Ahora es el verdugo y necesita volver a su papel para mantenerse en su zona de confort. Por eso, le interesa vender la imagen de que la televisión ha sido la causante de que su familia esté rota. Todo lo que tiene que ver con Antonio David me huele mal y me parece sórdido.
P: ¿Consideras que Olga Moreno es víctima?
R: Durante muchos años ha sido consciente de que era una aliada necesaria pero creo que ha reaccionado. Más vale tarde que nunca. El silencio de Olga Moreno en cuanto a la separación le beneficia. ¿Cuántas veces la hemos visto en televisión defender a capa y espada todo lo que se decía sobre Antonio David Flores? Con su discurso ha llegado a tirar por tierra lo que más tarde ha contado Rocío Carrasco.