Feliz, reflexiva y sincera. Así se encuentra Desy Rodríguez nueve años después de su participación en ‘Gran Hermano’. Procedente de Sevilla, la joven puso rumbo a Guadalix de la Sierra para vivir uno de sus sueños. Semana tras semana, consiguió ganarse el favor del público llegando a convertirse en la tercera clasificada de ‘GH 14’. Un puesto que luego le permitió colaborar en distintos programas del universo Mediaset.
A los pocos meses de dar el salto al estrellato, Desirée Rodríguez relató la mala relación que tenía con su familia y llegó a protagonizar más de un desencuentro televisivo con algún miembro de esta. Ahora, la artista ha concedido una entrevista en exclusiva para Outdoor donde se sincera sobre el verdadero motivo por el que dejó de tener contacto con ellos ya que justificaron el abuso sexual de su hermano. Además, enamorada, la ex gran hermana habla de cómo imagina la boda con su novio, con el que vive desde hace un año.
¿Por qué decidiste presentarte a ‘Gran Hermano’?
Yo no atravesaba un buen momento familiar y pasaba mucho tiempo con una amiga. Un día nos pusimos a ver ‘Gran Hermano’ y nos encantó. Entonces, yo que era menor de edad, le dije que me gustaría formar parte del programa. Y así fue. Al cumplir los 18 años me presenté en varias ocasiones. Además, como no había hecho toda mi transición, lo hacía una veces como chico y otras como chica. Yo tenía el presentimiento de que ‘GH 14’ era mi año y no me equivoqué. El programa empezó pero el casting seguía abierto y decidí probar suerte. Fue todo muy rápido, en cuestión de días me dijeron que era concursante.
¿Cómo recuerdas la experiencia?
Yo no era consciente de que estaba cumpliendo uno de mis sueños. Sabía que convivía con gente desconocida y que tenía mala relación con más de la mitad pero estaba en una nube. Recuerdo que cuando la audiencia me salvaba, que superé más de seis nominaciones, era una oportunidad para poder seguir viviendo lo que siempre había soñado. Fui yo en todo momento, con mis cosas buenas y malas.
Protagonizaste grandes disputas con Gonzalo Montoya. ¿Cómo es tu relación con él?
No lo puedo ni ver. Me da muchísimo asco. La última vez que coincidí con Gonzalo fue en la grabación del debate final de ‘GH 14’. No lo soporto y no he vuelto a saber nada de él.
¿Y con Igor Basurko?
Con él protagonicé una auténtica guerra dentro de ‘Gran Hermano’. Hace unos meses un seguidor, que era amigo suyo, me dijo que Igor había cambiado mucho y que quería hablar conmigo. En un principio, yo creía que era una broma pero le hice una propuesta para ver si era cierto. Le comenté de hacer un directo a través de Instagram y me pidió disculpas, en directo, por todo lo que había ocurrido en el pasado. No somos amigos pero tenemos un trato cordial.
En ‘GH 14’ hablaste de la mala relación con tu familia. ¿En qué punto os encontráis ahora?
No tenemos relación. Antes de que mi padre falleciera a causa de un cáncer sí que coincidí con ellos en el hospital. Pero no he querido tener más contacto por mi salud mental y por todo lo que me han hecho tanto públicamente como en privado. Cuando mi padre estaba enfermo ellos venían a mi casa para estar con él. Unas navidades me fui a Valencia y cuando volví me encontré que habían cambiado la cerradura de la puerta y se habían deshecho de todas mis pertenencias: cuadros, muebles, ropa, etc.
Y eso no es lo más grave. Mi familia justificó que mi hermano mayor abusara de mí cuando yo tenía cuatro años. Lo vivía como auténticas pesadillas y cada día me repugnaba más mi hermano. Pero no fue hasta que hablé con el psiquiatra de ‘GH 14’ cuando acepté y me di cuenta de que no eran sueños sino unos abusos que había sufrido de verdad. Los había bloqueado de mi mente para no padecer.
¿Cómo reaccionaron ellos cuando se lo contaste?
Cuando se lo conté a mi familia me dijeron que eran juegos de niños y que él no sería consciente de lo que estaba haciendo. Mi hermano tenía 15 años. Además, un día me confesó que lo veía normal porque otro familiar nuestro hacía lo mismo con él. Si tu te subes al cuello de un niño pequeño y lo bloqueas de las manos para obligarlo y luego le dices que es un secreto entre los dos, ¿es un juego de niños?
Hace unas semanas hiciste pública tu preocupación de acabar en la cárcel por una multa de Hacienda tras un impago de impuestos. ¿Por qué no declaraste el dinero que cobrabas?
Cuando entré en ‘GH 14’ tenía 27 años y cobraba por cosas que jamás hubiera imaginado. Me pagaron hasta por hacer una entrevista para la revista de ‘Gran Hermano’. Es verdad que en el reality show no me hice rica porque no cobras mucho pero luego, en televisión, sí. Me enteré que si tenías dos contratos en un mismo año era obligatorio declarar a Hacienda. Yo le pregunté a mi representante y me dijo que por mi edad no tenía que hacerlo y que las propias empresas se encargaban de las retenciones.
Confiaste en él...
Entonces yo, que no tenía ni idea, confié en él y pasé del tema. Hasta ahora no he tenido un domicilio fijo y es cuando me ha llegado una notificación en la que se me requiere la cantidad de 6.000 euros. Me agobié porque no podía pagarlo y pensaba que podría acabar en la cárcel. Uno de mis planes era entrar en ‘Secret Story’, que estuve a punto, para poder hacer frente a la deuda pero no ha podido ser. Poco a poco recaudaré el dinero para poder pagarlo.
¿Con qué otro programa te gustaría volver a la pequeña pantalla?
Como fiel seguidora de ‘Gran Hermano’ me encantaría participar en alguna de sus versiones y poder disfrutar de la experiencia una vez más. Y otro formato que me gustaría sería ‘Supervivientes’. Tiene que ser muy duro pero vivirlo debe ser impresionante. Cuando me quitasen la comida y la nicotina me volvería loca. Me llamaron el año pasado pero finalmente no entré. A ver si hay suerte y puedo volver a la televisión. Llegué a pensar una estrategia para ‘Secret Story’.
Otra faceta tuya que hemos visto en televisión es la de actriz. ¿Cómo surgió la oportunidad de participar en la serie ‘La Veneno’?
Gracias a Los Javis la gente me toma más en serio. Muchos creen que cuando sales de ‘Gran Hermano’ eres una friki y que no vales para nada. Y eso es totalmente incierto. Se han dado cuenta de que soy capaz de hacer muchas más cosas cuando se me ha dado la oportunidad. Cuando ellos empezaron a grabar yo estaba en Italia trabajando de limpiadora. De repente, se pusieron en contacto conmigo a través de Instagram diciéndome que querían que formase parte del elenco de actores. Fui a hacer la prueba de cámara que consistía en una escena preparada y otras improvisadas para ver cómo lo hacía y les gusté a la agencia y a ellos y me contrataron.
¿Te costó prepararte el papel de Paca La Piraña?
En un principio me agobié porque el acento de Paca La Piraña no tenía nada que ver con el mio pero ellos me tranquilizaron. Mi papel era hacer de ella cuando era joven y en esa época Paca acababa de llegar de Almería. Por lo tanto, no tenía que modular la voz. Me confesaron que me cogieron porque era clavada a cuando ella era joven. Y recuerdo que, la primera vez que la vi, me dijo que, junto a La Veneno, era muy fan mía cuando salí en ‘GH 14’.
¿Cómo estás viviendo toda la polémica que hay por la Ley Trans?
La verdad es que la política es algo que no me agrada porque cada uno mira por su propio interés. Si hubiera más defensa y protección a las personas que pertenecen a colectivos minoritarios no pasarían las atrocidades que hemos visto como lo del pobre Samuel. Si ante estos delitos hubiera consecuencias graves para los que lo cometen, como pasar una larga temporada en la cárcel, se evitarían muchas cosas de las que pasan. Todos somos seres humanos y tenemos que respetarnos independientemente de los gustos, la orientación o nuestra identidad. El problema es que en la actualidad solo se implanta el odio.
¿Cómo es tu día a día?
Mi novio es el que trabaja. Yo soy ama de casa. Y aunque me gusta porque siempre he sido muy maruja, hay veces que me aburro. Un día a la semana, hago monólogos en Tiki-Tiki, un local en la Nogalera (Torremolinos). Me gustaría estar más días porque es algo que me hace feliz y con lo que me siento muy realizada. A mí me encanta estar ante el público y entretener. Me apasiona. ¡Un reality show para mí ya! (risas).
¿Cómo conociste a tu novio?
Conocí a Luciano Ortiz porque se puso en contacto conmigo para hacerme una entrevista en su perfil de Instagram después de estrenarse ‘La Veneno’. Desde que comenzamos a hablar hubo flirteo, lo seducí y me lo quedé. Desde que quitaron el cierre perimetral me fui de Sevilla a Torremolinos y aún no he vuelto. Con él vivo los mejores días de mi vida. No puedo imaginar una vida en la que no esté. Me aporta mucho en mi crecimiento personal.
¿Tienes planes de casarte con él?
Sí, estoy a la espera de recibir mi DNI con el cambio de nombre para gestionar la boda. Yo quiero casarme en el Ayuntamiento de Sevilla ya que aunque me sienta muy acogida en Torremolinos, no es mi ciudad. Además, es un edificio del siglo XVI de estilo plateresco y parece un palacio. Mi boda ideal sería allí. Yo quiero coche de caballos, bata de cola y luego los amigos y familia que he formado en todos estos años. Y, después, me gustaría que la celebración fuera de dos días en una hacienda sevillana.
¿Os gustaría ser padres?
La verdad es que estamos deseándolo tanto que ya hemos comenzado los trámites para serlo. Acudimos a charlas grupales sobre la adopción y estoy segura de que mi futuro marido será un buen padre. Él tuvo una crianza muy humilde en Argentina llena de valores y principios.