Almudena Martínez, más conocida por el público como Chiqui, se convirtió en una de las concursantes de la décima edición de ‘Gran Hermano’. Su naturalidad y lo risueña que es la llevaron hasta la gran final convirtiéndose en la tercera finalista del reality show. Pero su paso por televisión solo acababa de comenzar. La murciana protagonizó grandes momentos en otros programas de televisión. Y es que, la joven puso rumbo a Honduras como visitante y, sin esperarlo, se convirtió en concursante de la posterior edición, donde se quedó a las puertas de la final.
Ahora, trece años después de convertirse en personaje público, Chiqui ha repasado su paso por televisión en una entrevista concedida a Outdoor. Además, la exconcursante de ‘GH’ ha narrado cómo es su vida en la actualidad, qué tipo de relación mantiene con Borja y ha detallado en qué consiste su nueva profesión: vedette. Y no solo eso, también ha cedido unas instantáneas en las que se le puede ver desarrollando esta nueva faceta…
¿Cómo recuerdas tu salto a la fama?
Fue una experiencia inolvidable. En ningún momento pensé que tuviera tanta repercusión. En esa época no te podías imaginar lo que venía después de participar en ‘Gran Hermano’. Ahora, la gente está preparada y no va con los mismos objetivos. Muchos buscan dinero y televisión. En ese sentido, se ha perdido un poco esa esencia. Nuestra edición tuvo una buena aceptación por parte de la audiencia y logré llegar a la final y quedar tercera. A día de hoy, trece años después, la gente sigue parándome y me quieren mucho.
¿Qué es lo más gratificante de ser un personaje público?
Vives muchas cosas. Yo he colaborado y participado en varios programas y he conocido a mucha gente que antes veía por televisión. Pero, sin ninguna duda, lo que más me llega al corazón es cuando alguien me para y me dice que gracias a mis intervenciones televisivas ha logrado sobrellevar o salir de una depresión. Es algo muy bonito saber que has aportado un granito de arena para ayudar a alguien desde la distancia y sin conocerles.
Uno de tus grandes aliados en ‘GH 10’ fue Iván Madrazo. ¿Cómo es vuestra relación?
Para mí es mi hermano. Todos los días hablamos por teléfono y si nos tenemos que reñir mutuamente lo hacemos. La verdad es que seguimos como cuando estábamos participando en el reality show. Somos uña y carne.
¿Y con el resto de los compañeros?
Con Liz tengo contacto pero no nos podemos ver lo que quisiéramos porque ella vive en Madrid y al final quedamos cuando voy por temas de trabajo. Y con Orlando hablo de vez en cuando pero no es una relación muy estrecha. De otras ediciones mantengo con Dámaso Ángulo y con Laura Campos. Aunque no hayamos participado a la vez, los que hemos concursado en ‘GH’ somos una familia y luego formamos piña cuando nos conocemos.
Unos años más tarde, la productora de ‘Supervivientes’ te sorprendió confirmándote desde Honduras como la primera concursante de la siguiente edición. ¿Te lo esperabas?
No tenía ni idea. Yo simplemente fui a visitar a los que quedaban allí que eran Rosa Benito, Rosi Arcas, Tatiana Delgado y Sonia Monroy. En ningún momento pensé que iban a darme esa oportunidad. Además, es una experiencia que siempre había querido vivir. Antes de convertirme en personaje público siempre me había llamado la atención este reality show. Desde que salí de ‘GH’ uno de mis objetivos televisivos era participar en ‘Supervivientes’ y lo conseguí.
Si tuvieras que elegir, ¿con cuál de los dos realities show te quedarías?
‘Gran Hermano’ me dio la fama pero como experiencia ‘Supervivientes’ es brutal. Es un reality show extremo que te lleva a tu límite, tanto mentalmente como físicamente. Te dejan allí y te tienes que buscar la vida. Vives una multitud de momentos y emociones: pasas hambre, tienes frío, echas de menos a tu familia, reflexionas y creces como persona… Recuerdo que nos tuvieron que aislar por un temporal que se estaba comiendo la playa. Hasta al helicóptero le costó llegar para rescatarnos. Cuando todo pasó ninguno de los concursantes queríamos volver, imagínate lo duro que es. Aún así, participaría de nuevo.
¿Qué es lo más duro de ‘Supervivientes’?
Es verdad que te puedes llegar a sentir débil físicamente pero creo que lo primordial es no arrastrar cosas del exterior y estar bien mentalmente. Allí tienes muchas horas para pensar en tu vida, en tu familia y en tus cosas. Aunque pases hambre y frío lo más duro para mi son esos ratos porque si te pones a reflexionar en todo lo que hay fuera te dan ganas de abandonar. Lo mejor es intentar pasar las horas entretenido ya sea buceando, pescando o haciendo otra tarea. Por eso yo reconozco que el concurso de Rafael Lomana, que estuvo muchísimas semanas solo, es de aplaudir.
Si volvieras a participar en algún reality show, ¿con qué concursante te gustaría coincidir?
Con Kiko Hernández. Sé que me lo pasaría fenomenal y daríamos muchos momentazos. Le tengo muchísimo cariño.
¿Y con quién no te gustaría compartir experiencia?
Lo tengo claro, con Oriana. Con ella conviví unos días y doy gracias a que fueron pocos. Se comió las latas y abandonó. Si volviéramos a estar juntas en algún reality show acabaríamos tirándonos de los pelos. Es insoportable y muy difícil de llevar. Con la voz ya te molesta. Quiere todo para ella, parece una niña pequeña. Que ella esté en el mismo concurso es un auténtico hándicap. Si me dicen que tengo que entrar con Oriana, prefiero no hacerlo.
En la actualidad, ¿en qué programa te gustaría colaborar?
En ‘Sálvame’. Fue una etapa muy bonita. Cuando iba a trabajar lo hacía feliz y eso al final se transmite a través de las pantalla. Ojalá pudiera volver a ser reportera porque esos momentos los tengo grabados en mi retina y los recuerdo con muchísimo cariño y con una sonrisa en la boca. Me lo pasaba muy bien y si nos basamos en los datos de audiencia yo siempre he dado buenos resultados.
¿Cómo es tu día a día?
Llevo una vida muy normal. Me levanto, arreglo a mis hijas y las llevo al colegio. No paro en todo el día porque mientras hago las tareas domésticas, voy a comprar y cuido a mis niñas no me doy ni cuenta de lo rápido que pasan las horas. Y el fin de semana hago unos espectáculos en Murcia que están teniendo muy buena acogida.
¿Cómo surgió esta nueva faceta tuya?
Empezamos como una broma tres amigos y poco a poco ha ido cogiendo forma. Sin ninguna duda la mejor publicidad es el boca a boca y la gente queda maravillada cuando viene y lo ve. Esos ratos son especiales y nos divertimos mucho. Lo hacemos de corazón y eso el público lo nota. El espectáculo se llama ‘Enamórate’ y ahora estamos preparando otro navideño. Además, está enfocado a todos los públicos, tanto niños como adultos. Siempre me ha gustado el arte, bailar y cantar.
Has dicho que te dedicas íntegramente a tus hijas. ¿Cómo está tu relación con Borja?
Prefiero no hablar de él y tampoco puedo por temas judiciales que hay de por medio. No nos entendemos. Además, no tengo trato directo con él. Todo lo que hablamos de mis hijas es a través de mi suegra. No deseo nada malo a Borja, solo quiero que sea feliz y un buen padre con mis hijas.
En el amor, ¿tienes el corazón ocupado?
En ello estoy pero no cuaja nadie. Es muy difícil encontrar lo que busco. Ya no me conformo con cualquiera, me he vuelto muy exigente. Yo quiero un hombre que respete a mis hijas, que las quiera como suyas, que sea una figura de autoridad aunque ellas tengan a su padre. Al igual que si él tiene sus hijos yo los querría y trataría como si fueran míos. Y si no es así prefiero estar sola que mal acompañada.