Nada tiene que envidiarle a Bradley Cooper: le ponemos cara al marido de María Patiño

Con el estreno de ‘Star is a born’ descubrimos que María Patiño se había “enamorado” locamente de su protagonista. Pues bien, meses después y gracias a una storie que ha publicado la presentadora de ‘Socialité’, que ya está de vacaciones, hemos comprobado que su marido nada tiene que envidiarle a Bradley Cooper. Le ponemos cara a Ricardo Rodríguez, el discreto esposo de la gallega.

Este lunes 10 de agosto es cuando Patiño ha cogido las ansiadas vacaciones tras el duro trabajo que ha realizado durante todo el confinamiento. La presentadora ha estado al pie del cañón en ‘Socialité’ y como colaboradora en ‘Sálvame’ y ‘La última cena’. Gracias a ella, muchos españoles han podido poner una sonrisa a la dura realidad que desgraciadamente aún estamos viviendo por la pandemia del coronavirus.

Pero ahora ha llegado el momento de disfrutar de sus días de descanso. Por eso, María ha querido compartir con todos sus fans una foto de lo más romántica de sus días en Fuerteventura. Un destino y una escapada que realizó junto a su esposo el pasado fin de semana, tal y como publicaba la revista 'Lecturas'.

Pues bien, totalmente envueltos en arena y muy acaramelados, la periodista ha posado por primera vez en Instagram con su marido. Y sí, podemos confirmar que nada tiene que envidiarle al actor americano. Como banda sonora de fondo, la colaboradora de ‘Sálvame’ ha elegido el tema ‘Muero de amor’ de La bien querida. ¿No os parece muy romántico?

Una historia de amor que sellaron con una boda en Sri Lanka

Una cosa caracteriza a la comunicadora: mantiene su vida privada (hijo y pareja) al margen del público a pesar de la profesión a lo que se dedica. Y ese mismo perfil es el que utilizó para celebrar su boda en agosto del año pasado en Sri Lanka. Os mostramos las imágenes del enlace en este vídeo:

Un evento que pilló por sorpresa a todo el mundo y que nos enteremos cuando vimos que compartía en sus redes sociales una imagen vestida de blanco. Con un diseño de Ion Fitz y junto a su marido escribía lo siguiente: “Cruzamos océamos para encontrarnos”.