Marisol Vargas habla por primera vez de sus raíces y aclara si es realmente gitana: "Nunca he hablado de esto"
La integrante de 'Los Gipsy Kings' ha hablado acerca de sus antepasados en un directo
Marisol Vargas ha aclarado si es gitana o paya tras las dudas de sus seguidores
A los seguidores de 'Los Gipsy Kings' les gusta seguir conociendo a los protagonistas del docureality fuera de sus programas y están muy atentos a sus directos en las redes sociales para plantearles todas sus dudas. Así es como descubrieron que la madre de Noemí Salazar, Raquel Salazar, es paya y que, en ocasiones, ha sido discriminada en la comunidad gitana por ello.
Ahora, le han preguntado a Marisol Vargas, la madre de La Rebe, si también es paya y ella ha explicado que no lo es, aunque sí que tiene un antepasado que lo es. "Soy gitana porque mis padres son gitanos, pero es verdad que alguna de mis abuelas puede ser que fuera paya, ¿verdad, Dani, que se escuchó que una de mis abuelas y mi bisabuela eran payas?", ha comentado en su directo la matriarca de los Jiménez, confirmando esta información con su marido.
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"Nunca he hablado de este tema pero sí, mi bisabuela era paya", ha explicado la que fuera protagonista de 'Dos bodas gipsy'; un comentario que estaba escuchando su hija Susi Jiménez y que le ha llevado a compararlo con una frase que escucha mucho ahora en las redes sociales y es la de aquellas personas que remarcan que no son payas porque tienen un abuelo gitano.
A gran parte de sus seguidores les ha gustado mucho que Marisol Vargas haya compartido este dato con ellos, aunque algunos han desconfiado de esta información y piensan que está mintiendo acerca de sus raíces. También ha habido quien ha criticado que se considere gitana, alegando que si un antepasado es payo ella es, por tanto, mestiza.
En 'Dos Bodas gipsy', Marisol Vargas presentó a sus padres, Félix y Carmen, que se mostraron encantados con que su hija hubiera decidido hace 26 años cumplir con una de las tradiciones gitanas más conocidas, la de 'sacar el pañuelo' que demostró que era virgen antes de casarse con Dani Jiménez y comenzar una vida en común en Plasencia, ciudad en la que dieron la bienvenida a sus cuatro hijas, Rebeca, Susi, Graciela y Daniela, antes de mudarse a Sevilla.
