La Navidad es tiempo de fraternidad salvo para Fran Rivera. El hijo mayor de Carmen Ordóñez y "Paquirri" no recibirá estas fiestas ningún mensaje de felicitación por parte de sus hermanos. No se habla con ninguno de ellos. Ni con Cayetano, ni con Kiko Rivera ni tampoco con el menor de todos, Julián Contreras. Analizamos los motivos de estos distanciamientos tan feos.
Francisco y Cayetano Rivera han vivido épocas de máxima unión y otras de tensión extrema, como la que están pasando actualmente. La última bronca entre ellos vino a tenor de unas declaraciones de Fran asegurando que su hermano es un tanto torpe en los ruedos, algo que le sentó a Cayetano a "cuerno quemado" (nunca mejor dicho). Pero en este caso llueve sobre mojado y es que entre ambos ha habido otros follones como las cuentas económicas de la tradicional corrida goyesca de Ronda o que a Fran no le hiciese gracia que tras su separación Cayetano se instalase en la finca familiar.
La gestión de los objetos personales de su padre por parte de Isabel Pantoja obsesiona desde siempre a Fran Rivera. En los primeros momentos del distanciamiento de Kiko con la tonadillera, el DJ asumió el discurso de su hermano. Sin embargo, Kiko atacó a su hermano cuando éste criticó a la cantante de 'Marinero de luces' en una publicación diciendo que Carmina "nunca había sido ejemplo de nada". Este ataque dinamitó por completo el vínculo entre ambos.
No están mucho mejor con el hijo que Carmen Ordóñez tuvo con Julián Conteras, Julianín. Según éste, la ruptura no tiene escándalos: "En mi caso, no es una cosa que esté sujeta a polémica, no hay dardos. Se ha diluido, no queda ya. No tengo relación", dice. Si tiramos de hemeroteca podemos localizar la razón del cabreo: horas después de la boda de Cayetano con Eva González, Julián acudió al 'Deluxe' para poner de vuelta y media a sus hermanos.