Violeta Mangriñán explica agobiada el motivo por el que se olvida de que está embarazada de Gia. La exconcursante de ‘Supervivientes’ se encuentra en un avanzado estado de gestación. Ha superado el ecuador de su embarazo, su barriguita está enorme y, si todo sale según lo previsto, a finales del mes próximo mes de enero dará a luz a su segunda hija en común con Fabio Colloricchio.
Para la extronista de ‘Mujeres y Hombres y Viceversa’ su primer embarazo fue mágico, algo que no está ocurriendo con esta segunda gestación y que genera a Violeta cierta frustración y agobio.
Esas sensaciones que vivió durante los nueve meses del embarazo de Gala están siendo completamente diferentes a las que está teniendo embarazada de Gia. Esta realidad ha hecho reflexionar mucho a la influencer que, en un alarde de sinceridad, ha decidido abrirse en canal con sus seguidores y explicar cómo se encuentra.
“Me apetece compartir con vosotros algo que estoy sintiendo mucho últimamente…”, dice antes de irse a dormir. “Siento que Gala absorbe toda mi energía y atención, hasta el punto de que a veces se me olvida que estoy embarazada. Si no llega a ser por la tripota que tengo ya, a veces ni caigo", comenta la creadora de contenido, quien hace tan solo unos días decidía sincerarse sobre su verdadera relación con Fabio tras hacer saltar todas las alarmas.
Violeta soñaba con la idea de darle un hermanito o hermanita a Gala y, aunque consciente de los problemas y dificultades que ha supuesto en su vida la maternidad, se animó a buscar un segundo hijo con Fabio.
“Siento que no estoy viviendo este embarazo con el mismo entusiasmo”, afirma angustiada con la idea de no estar “prestándole toda la atención que merece a Gia”.
La valenciana, que lleva pensando en esto “últimamente todas las noches” reconoce que las atenciones que su hija de un año reclama le impiden focalizarse en su futura maternidad. “Y me pongo triste”, apunta.
Violeta es consciente de que, “teniendo una bebé tan pequeña” es imposible vivir su embarazo como la primera vez. Sin embargo, esta sensación que tiene de un tiempo a esta parte acaba minando su estado de ánimo.
“Os juro que me siento horrible”, asegura la joven hablando abiertamente del conflicto interno que siente en estos momentos y de cómo se siente al no poder dedicar parte de su tiempo para vivir y disfrutar este segundo embarazo.