{{#section.link.href}}
{{section.link.title}}
{{/section.link.href}}
La cuenta atrás ha comenzado. Isa Pantoja y Asraf Beno pondrán el broche a su bonita historia de amor el próximo 13 de octubre en Sevilla a través de una romántica y esperada boda civil a la que aún le faltan muchos detalles. La exconcursante de ‘GH VIP’, que ha llegado a tener pesadillas con su enlace matrimonial, suma ahora una nueva preocupación a su larga lista de inquietudes: su peso.
La hija de Isabel Pantoja ha ido a una de las últimas pruebas de sus vestidos. Allí, los modistos han medido y ajustado a la también exconcursante de ‘Supervivientes’ las piezas (habrá hasta 3 cambios de look) que llevará en su gran día.
La joven, que ha estado comiendo de manera saludable y saliendo a andar con su prometido para mantener su figura y poder entrar en sus vestidos, ha descubierto un pequeño problema en el atelier.
“Acabo de llegar de probarme, de ver que todo estaba bien… Me he quitado una talla. No lo entiendo y eso que tampoco he hecho gran cosa”, dice sin dar crédito de lo que ha adelgazado.
Esto obliga a la colaboradora a cambiar de manera radical sus planes y puesta a punto para la boda. “Íbamos a salir ahora a andar, pero yo no voy a salir, porque no puedo adelgazar más”, ha comentado mostrando su preocupación.
“Tengo que mantenerme en mi línea”, continúa tajante mientras bromea con todo aquello que piensa comerse para recuperar los kilos que ha perdido. “Me voy a comer… chocolate no, porque no lo he comprado”, dice bromeando y asegurando que “en verdad” lo que tiene que hacer no es engordar sino “mantenerme en mi peso”.
La hija de Isabel Pantoja reconoce haber estado "controlándose" con todo aquello que ha comido esta semana, aunque su ingesta de alimentos no puede ser considerada como 'dieta' y tampoco ha sido tan radical como para haber perdido una talla. En este sentido, achaca este repentino y rápido adelgazamiento a “los nervios” preboda. Unos nervios que podrían ir in crescendo en las próximas semanas, conforme se vaya acercando el gran día.
Falta justo un mes para que tenga lugar su esperadísimo enlace, al que acudirán importantes rostros conocidos y en el que también habrán sonadas ausencias. Las invitaciones ya están enviadas y la pareja se encuentra ya haciendo la lista definitiva de invitados confirmados a su boda.