Mario González, de 'La isla de las tentaciones', abre las puertas de su jardín: con piscina y solárium
El exparticipante de la quinta edición de 'La isla de las tentaciones' ha enseñado cómo es el jardín de su casa, situada en Madrid
Mario González ha mostrado que su jardín cuenta con una gran piscina, una zona para tomar el sol y otra para organizar reuniones sociales
En el porche hay muchos juguetes de Hugo, el hijo que el exnovio de Laura Casabela tiene en común con Sheila González
Mario González es muy activo en las redes sociales, donde comparte con sus seguidores muchos datos de su vida privada. Así, el exconcursante de 'La isla de las tentaciones' ha explicado que ha retomado su relación sentimental con Sheila González, la madre de su hijo Hugo, o que vive en el sur de Madrid, en una casa con jardín y piscina; una zona que ahora le ha mostrado al detalle a sus seguidores de Instagram.
Como suele hacer muchos directos en TikTok, sus seguidores ya intuían que su vivienda disponía de un jardín con piscina, pero ahora ha mostrado en unas stories de Instagram cómo es realmente esta zona de su casa, que como otras estancias de la misma delata a su propietario como padre de un niño de cuatro años, ya que se pueden apreciar en el porche varios juguetes del pequeño Hugo, como un futbolín adaptado a su altura o una pizarra para dibujar.
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El jardín está dividido en tres zonas claramente delimitadas: la de la piscina, que cuenta con césped artificial en el suelo y unas tumbonas que conforman el solárium de la estancia; el porche, techado y a la sombra donde hay sillas de exteriores que se pueden convertir en tumbonas y que da acceso a la casa; y una tercera zona situada al sol pero con suelo de baldosas donde el influencer ha instalado una gran mesa para hacer comidas, cenas y largas sobremesas con sus familiares y amigos.
El jardín goza de una gran privacidad, pues está separado de la casa vecina con una valla que simula la madera y de la calle con un seto muy frondoso y un muro de piedra. Además, cuenta con una vegetación muy cuidada, con flores en pequeñas macetas y helechos en parterres más grandes. Por último, hay una ducha exterior en la zona de la piscina y grandes farolas negras en el porche para que las veladas se puedan alargar toda la noche.