Susana Molina no suele entrar al trapo cuando, por unas cosas u otras, se convierte en objeto de críticas. Pero esta vez ha sido diferente. La que fuera participante de la primera edición de 'La isla de las tentaciones' junto a Gonzalo Montoya ha estallado y se ha visto obligada a explicar a qué se dedicaba antes de saltar a la fama hace diez años, ganando 'Gran Hermano 14'.
Son más de un millón de seguidores los que siguen a Susana Molina en Instagram y casi 330.000 los que ya acumula en TikTok. Sin embargo, a la primera red social la considera "territorio amigo", mientras que con la segunda todavía tiene sus más y sus menos. Especialmente, por el tipo de comentarios y mensajes que le llegan por parte de usuarios que parecen no conocer del todo bien la trayectoria profesional de la murciana.
Por eso, la joven de 33 años ha grabado un vídeo que le ha servido a modo de desahogo, pues considera que es muy injusto que se le está juzgando por "no haber dado un palo al agua en su vida" cuando nada tiene eso de cierto. "No quiero justificarme, pero he leído comentarios como que tengo "menos horas cotizadas que la gente que sube allí vídeos" o diciéndome que me ponga a currar", ha empezado expresando la que fuera pareja de Gonzalo Montoya.
Aunque tiene la conciencia muy tranquila porque nadie mejor que ella conoce su currículum vitae, Susana Molina se ha visto en la obligación de aclarar todos los trabajos que ha ejercido antes de hacerse conocida con 'Gran Hermano' en el año 2013. "Trabajo desde una edad en la que ni siquiera era legal trabajar y he trabajado en trabajos de todo tipo", ha comenzado resaltando la joven de Murcia, que, aunque asegura que "este tipo de comentarios no le afectan", sí ha querido aclarar su larga trayectoria laboral en todo tipo de ámbitos.
"Trabajaba al mismo tiempo que estudiaba en la Universidad para poder sacarme la carrera. Terminé la carrera cuando ya trabajaba en redes y ya ganaba dinero", ha continuado exponiendo la que fuera participante de la primera edición de 'La isla de las tentaciones', su última aventura televisiva antes de dedicarse de lleno a su carrera como influencer y mucho antes de convertirse en empresaria con dos negocios a su nombre.
Aunque ya hacía sus pinitos en las redes y sumaba una buena cantidad de dinero, Susana Molina empezó a trabajar como dependienta en el sector textil. "Me metí a trabajar en una tienda de ropa en la que cobraba 890 euros por 40 horas, supuestamente, porque al final siempre eran 50 porque no sabía estar parada y porque quería conocer gente en Sevilla, que era la ciudad a la que me había mudado, y así por lo menos conocía a chicas", ha recordado la ganadora de 'GH 14', que ha continuado repasando todo su historial profesional.
Ya en la actualidad, la influencer de Murcia está muy orgullosa de decir que sigue trabajando y "aportando muchísimo". Ya convertida en una de las influencer más cotizadas de nuestro país, y con dos negocios a sus espaldas, la exconcursante de 'LIDLT' ha respondido a las críticas con estas palabras de lo más tajantes que no hacen otra cosa que anular las críticas que ha estado recibiendo en los últimos días.
Además, en caso de no estar trabajando, Susana Molina sigue sosteniendo que ese tipo de comentarios nada tendrían de ciertos. "Seguirían sin ser verdad porque, como he dicho, he trabajado mucho y a una edad en la que ni siquiera me correspondía trabajar tanto ni tantas horas ni compaginarlo con estudios y responsabilidades que no tenía que tener en ese momento", ha zanjado la ganadora de 'Gran Hermano 14', que saltó a la fama hace ya diez años con su paso por Guadalix de la Sierra.