Raquel Salazar asegura que el hijo de Noemí es igual que ella: "Rubios con ojos claros"
Antoñito, el segundo hijo de Noemí Salazar, es rubio y tiene los ojos azules, algo que ha sorprendido a la familia
Raquel Salazar, la abuela materna, ha confesado que no sabe por qué se sorprenden porque ella es rubia y tiene los ojos claros
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¡Antoñito, el segundo hijo de Noemí Salazar y Antón Suárez, ya ha nacido! Tras una complicada cesárea, el pequeño ha llegado al mundo en una clínica madrileña para llenar de amor y felicidad a su familia, que se ha sorprendido mucho al descubrir que tiene el pelo rubio y los ojos azules. Los fans de 'Los Gipsy Kings' también se han quedado boquiabiertos al ver las fotos del bebé, pues esperaban que se pareciera a Mimi, la hija mayor de los Suárez Salazar, que es muy morena y tiene el pelo negro.
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Raquel Salazar, la abuela materna del bebé, ha asegurado en sus historias de Instagram que no entiende el motivo de la sorpresa por parte de sus familiares, ya que considera que Antoñito se parece mucho a ella por sus rasgos físicos. "¿Por qué sorprende tanto que el niño sea rubio y tenga los ojos azules?", le ha preguntado a su marido y a su hijo - abuelo y tío del bebé, respectivamente -, que le han contestado que "no esperaban" que fuera así porque "todos" son morenos.
"Perdonad, ¿me podéis mirar? ¿Cómo soy yo? ¡Es que acabo de caer que yo soy rubia con los ojos claros! ¡Mi nieto se parece a mí!", ha asegurado entonces Raquel Salazar, sorprendiendo así a sus familiares, que le han dicho que ella tiene mechones rubios en la melena porque se ha teñido y que, por tanto, Antoñito es el primer miembro de la familia que tiene el pelo rubio de forma natural.
"Y esa finura de cara tan bonita, ¡es que se parece a mí!", ha continuado diciendo Raquel, que ha asegurado que su familia no quiere encontrarles parecido al niño con ella, pero que por su parte está clarísimo. "No le puedes pasar el tinte en los genes al niño", "Antón era rubio de pequeño", han sido los comentarios que le han hecho sus familiares, ante lo que la matriarca ha estallado: "¡Y dale! Es que para la gente es malo que se parezca a mí".
"¿Parezco un coco? ¡No! Pues bien estoy", ha añadido Raquel, ante lo que su hijo Carlos le ha dicho que no es que ella sea fea y no quieran que el bebé se le parezca, sino que niegan su parecido porque realmente no creen que tengan rasgos físicos similares. "Nada, ¡que el niño se parece a mí!", ha sentenciado la feliz abuela, que ha estado en todo momento al lado de su hija mayor para darle la bienvenida al que es su cuarto nieto.