Patricia Donoso acaba de instalarse en su apartamento de Nueva York para disfrutar del ambiente navideño de sus calles y estar junto a la familia de su marido, Charles, a la que adora y está muy unida. Pero antes de desplazarse a la ciudad que nunca duerme, la nueva colaboradora de 'Sálvame' se ha despedido de su lujoso piso de Miami, aprovechando para grabar unos vídeos de varias estancias y compartirlos en sus historias de Instagram.
La primera vez que Patricia Donoso conectó en directo con 'Sálvame' fue desde el vestidor de su piso en Miami y mostró algunos de sus bolsos más exclusivos. Esa misma semana, realizó la conexión con el 'Deluxe' desde su salón, enseñando así las vistas sobre la ciudad desde esta exclusiva vivienda, que no es la única que posee en Estados Unidos, ya que también cuenta con un apartamento en Manhattan, el 'corazón' de la Gran Manzana, muy cerca de Central Park y del Museo Metropolitano de Arte.
Patricia ya está instalada en ese piso junto a Charles, tal y como ha mostrado en sus stories, donde también ha querido despedirse temporalmente de su apartamento de Miami, que está situado en el distrito de Brickell, el centro financiero de la ciudad, en el que priman los rascacielos compuestos por oficinas y viviendas de lujo que se alzan sobre la bahía Vizcaína. "¿Extrañaré estas vistas? No, chao Miami", ha comentado la colaboradora desde la terraza de la cocina, dejando claro que para ella no hay nada mejor que pasar las navidades en Nueva York en compañía de su familia política.
Tras este primer vídeo, la exparticipante de 'Hijos de papá' ha querido mostrarle a sus 142.000 seguidores que su piso cuenta, además de varias terrazas y el vestidor que mostró en 'Sálvame', una cocina con isla al estilo americano y electrodomésticos de última generación. También tiene una sala de cine - en la que hay un largo sofá de terciopelo rojo y unos sillones de tipo chaise longe forrados con el mismo tejido - que a juzgar por sus palabras es su estancia favorita de la casa, pues ha comentado que es lo único que va a echar de menos durante su estancia en Manhattan.
La habitación favorita de su marido es su sala de juegos, en la que tiene una piscina de bolas, escaleras para trepar por el techo y las paredes y una mesa con un gran ajedrez. Además, cuentan con una plaza de garaje para guardar el coche de lujo de Patricia, una sala con varios sillones giratorios que cuelgan del techo sobre un suelo de agua para relajarse mirando hacia la soleada ciudad por las grandes cristaleras y una gran terraza en la que hay una piscina y una zona de solárium con varias tumbonas.