Lucía Sánchez no ha aguantado más y ha decidido tomar una drástica decisión por el bien de su salud mental. Cansada de las críticas y comentarios despectivos que recibe constantemente en relación a su vida privada y su físico, la exconcursante de 'La isla de las tentaciones' actúa y pone medidas contra sus haters.
La peluquera siempre ha presumido de su capacidad para encajar las críticas. Ella sabía que dejar atrás el anonimato y convertirse en personaje público tendría consecuencias, sin embargo, jamás pensó que estas pudiesen llegar a afectarle hasta tal punto.
Harta de esta situación, la influencer se dirige a sus seguidores para comunicar el paso que ha tomado en relación al acoso que recibe en redes sociales. "Siempre he pasado de los comentarios malos y de la gente que quiere criticar, pero he llegado a un punto en que ese tipo de personas que no aportan nada bueno me ponen de los nervios", relata a través de sus historias de Instagram.
"Esto me afecta y me estoy dedicando a bloquear a todas esas personas y estoy siendo mucho más feliz", continúa. "Estoy eliminando y bloqueando a la gente que no haga un comentario constructivo. Quien me diga que algo no le gusta me da igual, no me importa ni lo voy a quitar, pero esa gente que no para de hacer comentarios ofensivos, fuera. No quiero gente así, adiós".
Sánchez ha querido señalar que "acepta" todo aquello que le llega con "educación" y ha querido poner un ejemplo de los dañinos comentarios que recibe. "No voy a entrar en comentarios de mi vida, porque esos ya son gordos, pero desde que estoy embarazada no paran de decirme cosas sobre el tamaño de mis tetas", contextualiza mientras hace referencia a lo mucho que le ha crecido el pecho tras quedarse embarazada de Mía, su hija en común con Isaac Torres.
"Llevo seis meses diciendo que me han crecido muchísimo porque estoy embarazada. No os imagináis el daño que causáis en la gente. A mí no me gusta tener unos pedazo de melones, pero ya se me quitarán", dice dolida mientras habla, una vez más, de los muchos cambios que ha experimentado su cuerpo a lo largo de todos estos meses. "Es porque estoy embarazada, tampoco es para que estéis todo el día diciéndome cosas", concluye la joven, que tan solo unos meses antes de quedarse encinta se sometió a una cirugía de aumento de pecho sin saber lo mucho que este crecería de forma natural poco después.