Sandra Pica ha roto su silencio tras su ruptura con Julen de la Guerra. Si bien es cierto que la que fuera participante de 'La isla de las tentaciones' no quiso entrar en muchos detalles tras poner fin al noviazgo con el madrileño, ahora ha decidido defenderse. Después de que el joven diera su versión de la ruptura, la catalana ha estallado ante sus acusaciones y ha contado toda la verdad que se esconde tras su ruptura.
Hace escasos días, Julen se pronunciaba respecto al vídeo de la exconcursante de 'Secret Story' en el que anunciaba la ruptura y quiso dar su versión de los hechos. Para el que fuera tronista de ‘Mujeres y Hombres y Viceversa’, Sandra le dejó de la noche a la mañana y, además, increpó en que ella se había vuelto una persona muy fría -un testimonio que conllevó una dura respuesta por parte de Alexia Rivas-.
Ante esta vorágine de acontecimientos, Sandra se ha visto obligada a aclarar la verdad. “En tú vídeo dijiste cosas que no son para nada ciertas”, ha puntualizado Sandra, dirigiéndose directamente al valenciano. Las palabras del que fuera su pareja han dejado a la catalana profundamente dolida y, aunque dijo que no iba a hablar más del tema, ha estallado ante las acusaciones. “No voy a dejar que me pisen y ser la mala”, ha comentado la influencer para su canal de mtmad:
Según explica, Sandra ha decidido dejar a Julen por varios motivos que ha decidido exponer por primera vez y es que, hay mucho más trasfondo tras su repentina ruptura. “No mientas y no digas que te pilló por sorpresa”, la ha dicho al exconcursante de ‘La casa de los secretos’ pues, la relación estaba yendo de mal a peor los últimos días, explica.
Debido al mal momento que ha atravesado Pica antes de su ruptura, se han ido forjando una serie de problemas en el noviazgo que han sido irrefrenables para la exnovia de Tom Brusse. La Sandra Pica ha querido sacar a al luz mensajes que le mandó Julen para defender su postura y su frialdad en la última conversación que ambos tuvieron. “Me dijiste cosas horribles”, ha sentenciado la joven. Así, y con sus motivos claramente expuestos, la empresaria ha decidido dar por zanjada su guerra pública.