Adara Molinero se desvive por su hijo, que es el auténtico centro de su universo. La que fuera ganadora de 'Gran Hermano VIP' ha disfrutado de un entrañable plan junto a Martín, su pequeño en común con Hugo Sierra, que ha crecido mucho. A sus tres años, el primogénito de la madrileña se ha convertido en un niño de lo más alegre y cariñoso.
No hay palabras en el diccionario que puedan describir el gran amor que siente Adara por su peque. A punto de cumplir tres añitos y medio, Martín no deja de sorprender a su mamá con sus ocurrencias y con los infinitos momentos de aprendizaje que vive junto a él.
A las puertas de darle a su vida un giro de 180º grados, mudándose junto a Rodri Fuertes a la casa que están construyendo y diseñando juntos, la que fuera ganadora de 'GH VIP' ha disfrutado junto a su niño de un divertido plan madre e hijo. Para evadirse del estrés y el agobio que a veces le producen las obras de su futuro nidito de amor, Adara Molinero se ha marchado a Alicante para disfrutar junto a su hijo de unas merecidas vacaciones.
Sacando a la niña interior que lleva dentro, la que fuera pareja de Gianmarco Onestini ha vivido un día de ensueño junto a Martín en la playa del Moncayo. Chapoteando en la orilla del mar, jugando juntos con la arena o descansando en una de las casetas alquilables (con colchón y parasol), Adara y su pequeño han creado juntos un nuevo recuerdo que, seguro, se convertirá en uno de sus favoritos de este verano.
"Verle disfrutar me da la vida", ha escrito la ganadora de 'Gran Hermano VIP' junto a una tierna imagen en la que se ve a Martín, su hijo en común con Hugo Sierra, correteando por la arena con un bonito bañador de color azul con estampado.
Una imagen preciosa con la que Adara ha continuado con su intención de, pase lo que pase, preservar la intimidad de su niño, pues no se le puede ver la carita, ya que aparece tapado estratégicamente por una de las telas que recubren la caseta que han alquilado para encontrar ese espacio de intimidad, lejos de miradas indiscretas.
Aunque sus seguidores no han podido ver el rostro del peque, sí que han podido ser partícipes de lo mucho y rápido que está creciendo el pequeño Martín. A sus tres años, el primogénito de la madrileña se ha convertido en todo un hombrecito que consigue derretir a su mamá con sus salidas y ocurrencias más saladas.
Aunque no acostumbra a mostrar en redes sociales nada que tenga que ver con su hijo, Adara Molinero sí ha querido compartir con su incondicional legión de fans este entrañable plan que ha conseguido hacerla sentir plena y feliz. Alejada del barullo de la capital y disfrutando de un apetecible día de playa junto a su hijo, sin duda, un momento mágico para la madrileña, que atraviesa una etapa personal de lo más satisfactoria.