Lleva cuatro años callando. Se alejó de la televisión para no tener que tomar partido en los conflictos familiares, sin embargo, tras la demoledora entrevista de Isa Pantoja, Irene Rosales ha roto su silencio. Cansada de que se le carguen responsabilidades ajenas, la exconcursante de 'Gran Hermano Dúo' responde a las duras acusaciones que ha recibido su marido tras la intervención en 'De viernes' de su cuñada.
Según ha contado Isa, Kiko Rivera la llevó al ginecólogo con 17 años contra su voluntad para corroborar si había perdido o no la virginidad. Ante estas durísimas declaraciones, Irene Rosales no ha tardado en pronunciarse.
"Lo que ha hablado Isa pues yo no le voy a quitar razón, ni muchísimo menos porque es su vivencia, pero lo que hasta donde yo sé mi marido adora y ha adorado a su hermana siempre y jamás ha querido hacerle algo malo y hasta donde yo sé... lo del tema ese de llevarla al ginecólogo... Primero Kiko era súper joven y Kiko fue un mandado y no lo hizo con la.... al revés", ha dicho en reiteradas ocasiones a los micros de Europa Press.
"Lo que haya pasado con Isa o no eso son cosas que hasta donde yo tengo entendido, de lo que ha tenido que pedir perdón mi marido, lo ha hecho. La relación ahí se enfrió o se distanció por el tema que hubo familiar y yo creo que al final los dos en su manera han reclamado un poquito de cariño cuando eran pequeños. Yo creo que a mi marido se le está cargando con una responsabilidad", dice mientras repite que en aquella época el Dj "tenía veintipocos años en algo que fue un mandado y sin más".
"Se nos está machacando con una brutalidad.... En casa a Isa se le ha tratado de maravilla, yo he tenido a Isa en mi casa, incluso viviendo con Dulce. Es verdad que de un tiempo aquí ha pasado eso, pero es que no puedo hacer más", asegura.
Irene, que no ha dudado en defender de manera incondicional a su marido, está harta de verse en siempre envuelta en los conflictos familiares de los Pantoja. "Yo tomé la decisión hace cuatro años de distanciarme de esto. De poner un punto final porque para mí no era sano. No es justo que se me cargue la responsabilidad de que tengo poca empatía o no defiendo. Yo no quiero entrar en nada ahí", ha dicho recordando que hace cuatro años tomó la decisión de no volver a hablar de su vida privada por su "paz mental".
"Hace tiempo ya que no hablo. Si hablo es porque entiendo que... No se me puede cargar esta responsabilidad, pedirme que intermedie, que haga nada más o de que me posicione. No se me puede pedir eso porque yo ya hace cuatro años tomé la decisión de que dejé un puesto de trabajo por no querer estar más en medio".
Que se me cargue con cosas que no pinto nada... me dicen que no tengo empatía, pero sí que la tengo. Lo siento mucho por lo que pueda haber pasado Isa, pero es que no puedo hacer nada. Yo tengo que estar en mi sitio, también tengo muchos dolores de cabeza y me los como. Yo no puedo estar haciéndome responsable de lo que haya podido pasar una persona o no. A mí siempre se me machaca", señala nerviosa y asegurando que si Isa y Kiko se han sentado a hablar en un plató lo han hecho para "reclamar un cariño" que a los dos les ha faltado.
La sevillana ha querido también defender a Kiko como marido y como padre, temas sobre los que no piensa tolerar ni un solo "comentario negativo". "Estoy recibiendo mucho machaque como mal padre y me están mencionando mucho a mis hijas y por ahí no entro. Kiko como padre es maravilloso y no voy a permitir que se diga ni una sola mala palabra ni que se le juzgue como padre ni como marido, porque por ahí no entro. O sea, yo estoy con mi pareja feliz, yo estoy muy contenta y como padre para mí es el mejor que he podido elegir para mis hijas y no voy a entrar por ahí. No voy a consentir comentarios negativos", ha dicho.