Diego Matamoros reaparece con el rostro desfigurado tras pasar unos días en Japón. El exconcursante de 'Supervivientes' se encuentra ya en casa de su exnovia, Marta Riumbau, con la que continúa viviendo a pesar de su ruptura. Después de su viaje por el país nipón, el hermano de Laura Matamoros retoma su contenido diario en redes sociales, donde se ha dejado ver con la cara completamente deformada.
Con media faz inflamada y sin apenas poder abrir uno de sus ojos, Diego se ríe - no le queda más remedio - de lo que le ha sucedido. No parece haber recibido asistencia médica, ni tampoco un diagnóstico para identificar la causa. No en vano, él parece parece tener claro que el motivo por el que tiene la cara "como un cuadro de Picasso" se debe a una fuerte reacción alérgica.
Concretamente a la picadura de algún insecto, que podría haberle picado mientras dormía en la casa que su exnovia posee a las afueras de Madrid. Con el rostro deformado, el único hijo varón de Kiko Matamoros bromea con su situación. Por su reacción, tranquila y calmada, se descarta que la picadura pudiese corresponder a algún animal venenoso o que pudiese haber puesto en peligro su vida.
Las angulosas facciones del creador de contenido se han desdibujado prácticamente por completo. En el lado afectado, apenas se intuye su prominente pómulo o mandíbula. Para él, que es muy presumido y que no duda en recurrir a la medicina estética y a la alta cosmética para mejorar su aspecto, esto podría suponer un problema. "Hoy un bicho ha decidido dejarme con media cara como un cuadro de Picasso", decía a través de sus historias de Instagram mientras hacía referencia al famoso pintor cubista.
Horas de silencio han causado cierta preocupación en sus seguidores, a los que Diego ha querido tranquilizar hace apenas unos minutos, actualizando su estado de salud. Sin más síntomas que la inflamación de su rostro, que poco a poco va desapareciendo, Matamoros hace acto de presencia en sus redes para confirmar que está y se encuentra bien. "Estoy recuperando mi cara", ha dicho desde la cocina del chalet de su exnovia, mientras muestra una leve mejoría.